Peshawar, mataron a tiros a dos sijs
de Shafique Khokhar

El incidente provocó protestas y una sentada en la Grand Trunk Road. En otro atentado en Khyber Pakhtunkhwa murieron tres soldados pakistaníes y tres niños. Obispo anglicano de Peshawar: "Algunos delincuentes quieren perturbar la paz y la armonía interreligiosa de la ciudad".

 


Peshawar (AsiaNews) - Dos miembros de la comunidad sij fueron asesinados a tiros ayer en la zona del bazar de Bata Tal, en Sarband. Las víctimas fueron identificadas como Saljit Singh, de 42 años, y Ranjit Singh, de 38. Ambos vendían especias en el mercado.

La comunidad sij y otras minorías religiosas de Pakistán expresaron su profundo dolor. Enarbolando banderas negras junto a la bandera nacional de Pakistán, un grupo de personas bloqueó la Grand Trunk Road con una sentada en señal de protesta.

Según las investigaciones iniciales, podría tratarse de una disputa por cuestiones de dinero o de propiedad que se convirtió en un tiroteo. La policía acudió al lugar de los hechos y trasladó los cuerpos al hospital. Los agentes están buscando al criminal.

Hace pocos días se produjo otro atentado en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa. En la frontera con Afganistán un terrorista suicida detonó un explosivo junto a un vehículo de las Fuerzas de Seguridad, matando a tres soldados pakistaníes y a tres niños que estaban cerca. Otros niños que estaban jugando en la calle resultaron heridos. Las agencias de inteligencia están investigando para identificar al asesino.

Los soldados muertos fueron identificados como Lance Hawaldar Zubair Qadir, Uzair Asfat y Qasim Maqsood. Los niños tenían 4, 8 y 11 años.

El primer ministro Shehbaz Sharif condenó el atentado terrorista y pidió al gobierno de Khyber Pakhtunkhwa que garantice más seguridad para los ciudadanos y las minorías de Pakistán. Las mismas críticas llegaron por parte del Ministro del Interior, Rana Sanaullah, que ordenó al Inspector General de la Policía que presente un informe sobre el incidente.

Monseñor Humphrey Sarfaraz Peter, obispo anglicano de Peshawar, también condenó duramente el atentado. Instó al gobierno a detener a los responsables, y afirmó que "algunos delincuentes quieren perturbar la paz y la armonía interreligiosa de la ciudad".