Faisalabad, joven cristiana de 15 años secuestrada por un hombre mayor de 40
de Shafique Khokhar

Dos personas conocidas la subieron a un rickshaw cuando se dirigía a su trabajo de empleada doméstica. Temen que, como ya ha ocurrido en muchos otros casos, los secuestradores presenten un certificado de conversión al Islam para inscribir el matrimonio. El activista de derechos humanos Lala Robin Daniel declaró: "Organizaremos una sentada en Faisalabad y nos quedaremos allí con las familias de las víctimas hasta que los tribunales tomen medidas concretas contra los culpables".


Faisalabad (AsiaNews) - Una vez más, una niña cristiana llamada Saba, de 15 años, fue víctima de un secuestro de trasfondo sexual en Pakistán, perpetrado por personas conocidas. Ocurrió el 20 de mayo en el barrio Madina Town de Faisalabad, en el estado de Punjab. Muqaddas, la hermana de Saba, contó que ambas se dirigían a las casas donde trabajan como empleadas domésticas. Alrededor de las 9 de la mañana dos personas de más de cuarenta años, que fueron reconocidas como Muhammad Yasir y Muhammad Riaz, junto con sus amigos, empujaron a Muqaddas y subieron a Saba al auto-rickshaw, llevándosela con ellos.

Su madre, Rubina Nadeem, afirmó que Saba fue secuestrada "para cometer adulterio" y la mantienen cautiva en un lugar desconocido. Las circunstancias fueron confirmadas por dos testigos, Tariq Iqbal y Amir Daniel, que cruzaban la calle de camino a su trabajo cuando la niña fue secuestrada. La mujer presentó una denuncia en la comisaría de policía de Madina Town citando el delito 365-B del código penal de Pakistán que dice: "Cualquiera que rapte o secuestre a una mujer con la intención de obligarla, o sabiendo que puede ser obligada a contraer matrimonio con una persona contra su voluntad, o con el propósito de forzarla o inducirla a mantener relaciones sexuales ilícitas, o sabiendo que es probable que sea forzada o inducida a mantener relaciones sexuales ilícitas, será condenado a cadena perpetua y además castigado con una multa".

La policía está buscando a los culpables pero todavía no ha podido localizar a la niña desde el día en que fue secuestrada. Simon Aleem, activista de derechos humanos, afirma que Saba es una niña inocente y víctima de una injusticia que por desgracia sigue repitiéndose. Muchas niñas cristianas han sido atacadas y secuestradas. Unos días después, el secuestrador presenta el certificado de conversión de la niña y afirma que ella aceptó el voluntariamente el Islam y se casó con el secuestrador. “El gobierno -comenta Aleem- debe tomar medidas inmediatas contra los secuestradores de Saba Nadeem. ¿Cómo es posible que una niña menor de edad, secuestrada delante de la gente, acepte el Islam por su propia voluntad y se case con la misma persona que la secuestró? En el caso de Saba, ambos secuestradores tienen más de 45 años y lo mismo está pasando en otros casos de secuestro de niñas cristianas: ¿cómo es posible que nuestras niñas menores de edad se enamoren de hombres viejos?”.

“Siempre que hay un problema con el gobierno o con los políticos ricos -añade Lala Robin Daniel, otro activista de Faisalabad-, los tribunales se abren incluso de noche sólo para hacer justicia a los ricos. ¿Por qué estos tribunales no pueden permanecer abiertos para impartir justicia a estas familias pobres de las minorías? Organizaremos una sentada en Faisalabad y permaneceremos allí con las familias de las víctimas hasta que los tribunales tomen medidas concretas contra los culpables y traigan de regreso a las niñas secuestradas. Ha llegado el momento de alzar colectivamente la voz contra estos crímenes”.