El padre Jeevantha Peiris fue sancionada junto con otros activistas que habían denunciado la violencia de los partidarios del gobierno contra la concentración frente al palacio presidencial, el 9 de mayo. El sacerdote explicó a AsiaNews: “Quieren debilitar aún más a las víctimas, pero nuestra lucha no se detendrá”.
Colombo (Asia News) - Un tribunal de Sri Lanka impuso a un sacerdote católico la prohibición de salir del país por su participación en las protestas contra el presidente Gotabaya Ratajapaksa. Al padre Amila Jeevantha Peiris, conocido en Colombo por su compromiso en favor de los derechos humanos, le retiraron el pasaporte el 23 de mayo, así como a otros activistas que desde hace semanas participan en el "GotaGoGama", la concentración frente al palacio presidencial que exige la renuncia de Rajapaksha por la dramática situación económica en que se encuentra sumido el país.
“El gobierno – explicó el padre Jeevantha a AsiaNews – está enviando el mensaje de que hará a las víctimas aún más vulnerables. Sin embargo, digan lo que digan, hagan lo que hagan, nuestra lucha no se detendrá con intimidaciones”. El sacerdote agregó que las protestas terminarán cuando no solo el presidente sino también el nuevo primer ministro Ranil Wickramasinghe hayan renunciado.
Las autoridades dicen que la orden judicial se emitió para profundizar la investigación sobre la denuncia presentada por el padre Pieris y otras personas en relación con las agresiones de partidarios del gobierno contra manifestantes pacíficos el 9 de mayo.
“En un momento en que el país debe hacer frente a tantos problemas graves que afectan a la población, se está dando prioridad a la prohibición de salir del país a un grupo de personas entre las que se encuentra el padre Jeewantha Peiris”, dice a AsiaNews el obispo Asiri Perera, expresidente de la Iglesia Metodista de Sri Lanka. “He visto al padre Jeevantha cuando fue al lugar de los enfrentamientos y habló con los jóvenes de una manera muy profunda - sigue diciendo el prelado metodista- orientando a la comunidad hacia caminos pacíficos. No solo debemos alentar a los jóvenes, sino también prevenir nuevas tragedias en Sri Lanka".
La hermana Deepa Fernando, religiosa de la Sagrada Familia y activista de derechos humanos, añade: “Condeno enérgicamente el ataque deliberado del régimen de Rajapaksa contra manifestantes pacíficos desarmados, como el padre Pieris y su grupo. Le han retirado el pasaporte porque presentó una denuncia por los ataques. El padre Jeevantha promueve diálogos interreligiosos y participa en numerosas actividades culturales y religiosas. ¿La prohibición de salir del país es un premio por el buen trabajo que está haciendo?”.
Un sacerdote anglicano, el P. Marimuttu Sathivel, también se suma a la protesta por la disposición contra el P. Pieris: “Lo triste -comenta- es que el poder judicial y la política se han unido en esta medida absurda, cuando los jueces deberían estar de parte de las víctimas. Y ésa es una razón más para apoyar al p. Jeevantha y los que están luchando en GotaGoGama".