Israel oculta los resultados de la investigación sobre la violencia en el funeral de Abu Akleh

Ayer se concluyó la investigación interna de la policía y se presentaron los resultados al Ministerio de Seguridad Pública. Aunque no serán publicados, se filtraron algunas admisiones de responsabilidad y errores en la gestión del incidente. La acusación del hermano de la periodista, Antón: intentan "encubrir su accionar y sus errores".


Jerusalén (AsiaNews) - La policía israelí concluyó una investigación interna para determinar las responsabilidades en los incidentes que marcaron el funeral de la periodista cristiana palestina Shireen Abu Akleh. Las personas a cargo de la investigación presentaron un informe al Ministerio de Seguridad Pública y han puesto al corriente al titular del dicasterio, Omer Bar-Lev. Al mismo tiempo, decidieron mantener en secreto el contenido de la investigación, que no se hará pública, al menos por el momento. Sin embargo, se filtró información referida al rol y la responsabilidad de los agentes en los enfrentamientos, tal y como muestran los vídeos y las imágenes difundidas en las redes sociales.

La reportera de Al Jazeera, con una larga carrera a sus espaldas, que abarca reportajes e historias de la región, fue asesinada el mes pasado, muy probablemente por balas disparadas por soldados israelíes. Su muerte se produjo mientras cubría una operación del ejército en un campo de Jenin, en Cisjordania. Según una investigación palestina, fue un soldado israelí el que abrió fuego y disparó deliberadamente contra la periodista, un acto equiparable a un crimen de guerra. Israel desmiente estas acusaciones, y plantea la hipótesis de un palestino armado que mató a la periodista durante el tiroteo. 

Lo cierto es que su muerte provocó la protesta de la población palestina, cristiana y musulmana, que desplegó banderas y reivindicó su orgullo y pertenencia durante el funeral, lo que provocó una dura reacción por parte de la policía israelí. El operativo policial comenzó en el St. Joseph Hospital, un centro hospitalario dirigido por religiosas, en Jerusalén. La acción brutal de la policía fue condenada sin ambages y con inusitada dureza por las Iglesias cristianas de Tierra Santa, en primer lugar por el Patriarca Latino.

Una de las primeras reacciones a la conclusión de la investigación policial fue la de Anton, el hermano de Abu Akleh: "No nos interesa lo que diga o haga Israel”, dijo a AFP, “porque todo está claro en las fotos y los vídeos. La policía es la agresora", añadió, subrayando una vez más que las autoridades israelíes "intentan encubrir su accionar y sus errores".

La investigación policial habría terminado ayer, pero los resultados siguen siendo secretos. La decisión de ocultar los datos ha suscitado las críticas de activistas y asociaciones pro derechos humanos, que quieren esclarecer no sólo la muerte de la periodista cristiana, sino también la violencia que se produjo durante el funeral. Según el comisario de policía Kobi Shabtai, "el cortejo fúnebre fue una situación compleja" y es "imposible" permanecer "indiferente ante imágenes tan duras". Hay que aclarar lo sucedido, continúa, pero por ahora la investigación se mantiene en el más estricto secreto a pesar de que hay una admisión de responsabilidad, aunque mínima y muy genérica

Una investigación paralela de la cadena de televisión Channel 13, basada en información oficial filtrada por personas cercanas a la investigación, determinó que la policía "podría haber evitado" el uso de la fuerza. Se trató de una acción violenta en la que incluso se utilizaron granadas aturdidoras contra manifestantes y ciudadanos indefensos