El Papa Francisco abriĆ³ Irak al turismo internacional

Decenas de youtubers, influencers, artistas y personalidades del mundo árabe y no árabe visitaron recientemente el país y exaltaron su belleza. Según los expertos, el interés por el país está relacionado con el viaje apostólico, que tuvo "gran impacto". El gobierno ha tomado medidas para facilitar los ingresos internacionales, eliminando los visados para 36 países.


Bagdad (AsiaNews) - Decenas de celebridades de YouTube, influencers, productores de contenidos web, artistas y expertos en medios de comunicación han visitado recientemente Irak. De esta nación, asolada durante mucho tiempo por la guerra y la violencia sectaria, han exaltado su belleza, promoviendo el turismo. Esta aprobación está muy vinculada al viaje apostólico del Papa Francisco al país árabe en marzo del año pasado, una visita que ha tenido, según los expertos, "un gran impacto" en la apertura al exterior, en la promoción del turismo y los viajes de los visitantes regionales e internacionales. Hoy, como nunca antes, se ha convertido en una especie de símbolo de estatus publicar una foto o una película delante de la casa del profeta Abraham, donde el pontífice se detuvo a orar e hizo un llamamiento por la paz.

El año pasado y en los seis primeros meses de 2022, decenas y decenas de "youtubers", cantantes árabes famosos, influencers de Europa, Estados Unidos, Egipto y Líbano, Kuwait y Australia, por citar sólo algunos, visitaron Irak y ensalzan su belleza en vídeos y artículos. Su presencia ha contribuido -y no poco- a cambiar una opinión estereotipada sobre el país, muchas veces descrito como inestable y caldo de cultivo de terroristas.

El popular creador de contenidos de YouTube Dear Alyne, que publica en el canal Nas Daily, con 8,53 millones de suscriptores, lanzó el pasado mes de marzo un amplio reportaje sobre su visita a Irak, titulado: "¿Es Irak peligroso?". El vídeo critica los estereotipos que caracterizan al país árabe y ensalza, por el contrario, su belleza histórica, artística, cultural y sus paisajes. Gustav Rosted, un influencer danés con más de 252.000 suscriptores en su canal, fue uno de los primeros en visitar Irak luego de la guerra contra el Estado Islámico (EI, antes ISIS). Confesó a Al-Monitor que sintió una “inmensa felicidad" al encontrarse con un pueblo que lo recibió "con los brazos abiertos". Durante su estadía también realizó un experimento social: pidió ayuda a personas al azar y nadie escatimó esfuerzos a la hora de dar algo de comida, dinero o un lugar para dormir. Una "generosidad" que rara vez se encuentra en otros países, dijo.

En 1973, llegaron a Irak más de 500.000 turistas extranjeros, una cifra equivalente al 25% del total de turistas. Las guerras y las sanciones, combinadas con la deriva extremista, hundieron al sector del turismo. El gobierno adoptó recientemente una serie de medidas para facilitar el ingreso al país y utilizó las redes sociales e Internet para promover los viajes internacionales, junto con la revocación de los visados de entrada a 36 naciones -la mayoría occidentales-, entre ellas Estados Unidos, el Reino Unido, algunas naciones de la UE y Australia.

Eman Sobhy, una activista egipcia famosa en YouTube, expresó en un vídeo su admiración por la armonía social y las relaciones entre las distintas sectas y religiones de Irak, una nación que suele ser tristemente famosa por la deriva sectaria y la violencia confesional. La mujer es una musulmana suní y visitó la ciudad santa chiíta de Nayaf, donde rezó, siguiendo los rituales suníes, en la mayoría de las mezquitas y santuarios. En ningún momento fue acosada por los chiíes, que son mayoritarios en el país.

Entre los lugares más visitados por las personas influyentes y las personalidades del mundo social se encuentran las zonas históricas y los sitios arqueológicos de Irak, en particular el Zigurat de Ur, hogar del profeta Abraham, y los pantanos históricos de la gobernación de Nassiriya. Sin embargo, a pesar del creciente número de turistas extranjeros y de los esfuerzos del gobierno por reavivar el nombre y la reputación del país, aún queda mucho por hacer para que se convierta en un destino turístico de multitudes y a escala mundial.