El Papa a los nuevos cardenales: lleven el fuego de Jesús, como Casaroli y Van Thuan

Francisco presidió el Consistorio en el que creó 20 nuevos cardenales, entre ellos seis prelados asiáticos. Citó como modelos al secretario de Estado para el diálogo con Oriente y al vietnamita que cuidó de su carcelero. El nuevo cardenal de Mongolia, Giorgio Marengo: el gobierno de Ulán Bator invitó oficialmente al Pontífice a visitar el país y Francisco respondió que tiene intención de realizar el viaje.


Ciudad del Vaticano (AsiaNews) - Llevar al mundo de hoy el fuego del celo misionero, pero también el de la mansedumbre de Jesús. Es la tarea que el Papa Francisco encomendó hoy a los 20 nuevos cardenales creados solemnemente esta tarde en la Basílica de San Pedro, en el octavo consistorio de su pontificado. Con ellos, el Sagrado Colegio cuenta ahora con 226 cardenales, de los cuales 132 son actualmente electores en caso de un futuro cónclave.

Al comentar el pasaje del evangelio de Lucas en el que Jesús dice que ha venido "a traer fuego a la tierra", el pontífice invitó a mirar las dos caras de este fuego: "la llama poderosa del Espíritu de Dios, Amor apasionado que purifica, regenera y transfigura todo", pero también las brasas "suaves y escondidas" junto a las cuales Él espera a los discípulos tras la pesca milagrosa en el lago de Galilea, relatada en el evangelio de Juan.

"El fuego poderoso -explicó- es el que animó al apóstol Pablo en su incansable servicio al Evangelio, en su "carrera" misionera, guiada y siempre impulsada por el Espíritu y la Palabra.

Es también el fuego de tantos misioneros y misioneras que han experimentado la fatiga y la dulce alegría de evangelizar, y cuya vida misma se ha convertido en evangelio, porque han sido ante todo testigos". Pero es inseparable del otro rostro del testimonio, el de la magnanimidad y la mansedumbre. A este respecto, el Pontífice citó el ejemplo de san Carlos de Foucauld: “durante mucho tiempo, él permaneció en un ambiente no cristiano, en la soledad del desierto, y centró todo en la presencia: la presencia de Jesús vivo, en la Palabra y en la Eucaristía, y su propia presencia fraterna, amistosa y caritativa".

Son dos caras que hay que cultivar, dijo el Papa a los nuevos cardenales, y señaló a dos de sus predecesores como ejemplo. "Un cardenal -dijo Francisco- ama a la Iglesia, siempre con el mismo fuego espiritual, ya sea que se ocupe de grandes cuestiones o de asuntos pequeños; tanto al encontrarse con los grandes de este mundo como con los pequeños, que son grandes ante Dios”. “Pienso, por ejemplo, en el cardenal Casaroli, justamente famoso por su mirada abierta al seguir los nuevos horizontes de Europa después de la guerra fría, con su diálogo sabio y paciente. Y Dios no permita que la miopía humana vuelva a cerrar los horizontes que él abrió. Pero a los ojos de Dios -continuó- son igual de valiosas las visitas que hacía regularmente a los jóvenes reclusos de una cárcel de menores de Roma, donde le llamaban ‘Don Agostino’".

Pero además del secretario de Estado vaticano de los años de diálogo con Europa del Este, el pontífice también quiso señalar como ejemplo al cardenal vietnamita François-Xavier Nguyễn Van Thuân, "llamado a pastorear al Pueblo de Dios en otro escenario crucial del siglo XX, y al mismo tiempo animado por el fuego del amor de Cristo, para cuidar el alma del carcelero que hacía guardia a la puerta de su celda". "Jesús -concluyó el Papa dirigiéndose a los nuevos cardenales- quiere arrojar este fuego también hoy en la tierra; quiere volver a encenderlo en las orillas de nuestras historias cotidianas. Nos llama por nuestro nombre, nos mira a los ojos y nos pregunta: ¿puedo contar contigo?".

A continuación, Francisco entregó el birrete, el anillo y el título a 19 de los 20 nuevos cardenales. Uno de ellos, el ghanés Richard Kuuia Baawobr, obispo de Wa, no pudo estar presente en la ceremonia ya que se encuentra hospitalizado debido a un problema de salud surgido tras su llegada a Roma. Entre los nuevos cardenales hay seis asiáticos, todos ellos electores: son el coreano Lazarus You Heung-sik, prefecto del dicasterio para el Clero y ex arzobispo de Daejeon; Virgilio do Carmo da Silva, el arzobispo de Dili, en Timor Oriental; los dos prelados indios, Filipe Neri António Sebastião do Rosário Ferrão, arzobispo de Goa y Anthony Poola, arzobispo de Hyderabad; el arzobispo de Singapur, William Goh Seng Chye y el italiano Giorgio Marengo, misionero de la Consolata y prefecto apostólico de Ulán Bator, en Mongolia.

Este último anunció hoy que el Papa Francisco ha recibido una invitación oficial para visitar Mongolia. La delegación oficial procedente de Ulán Bator que viajó para asistir al Consistorio, encabezada por el ex presidente Enkhbayar, entregó un mensaje formal del actual presidente Khürelsükh. "El Papa", relató el flamante cardenal Marengo, "mostró un gran interés por la propuesta y manifestó su intención de realizar este viaje, siempre que sus condiciones de salud y los compromisos ya programados lo permitan".

Finalmente, durante el Consistorio, el Papa Francisco aprobó la proclamación de dos nuevos santos -el obispo Giovanni Battista Scalabrini, obispo de Piacenza, fundador de la Congregación de los Misioneros de San Carlos y de la Congregación de las Hermanas Misioneras de San Carlos Borromeo, y Artémides Zatti, laico salesiano argentino- fijando su canonización para el domingo 9 de octubre de 2022.