El jefe de la regencia occidental de Seram negó a la comunidad cristiana el acceso a una carretera para dirigirse a un evento religioso nacional. Entre 1999 y 2002 se produjeron en esa zona enfrentamientos sectarios entre protestantes y musulmanes que causaron la muerte de más de 5 mil personas. Monseñor Seno Ngutra: las autoridades no siempre son amistosas con los cristianos.
Ambon (AsiaNews) - El obispo de la diócesis de Amboina acusó a las autoridades locales de obstaculizar y complicar la convivencia pacífica entre las comunidades religiosas de las Molucas.
En un encuentro con periodistas que tuvo lugar en su residencia, Mons. Seno Ngutra criticó ayer abiertamente al jefe de la regencia de Seram occidental, región donde entre 1999 y 2002 los enfrentamientos sectarios entre musulmanes y cristianos protestantes causaron la muerte de más de 5 mil personas.
El general Andi Asaddudin, que gobierna el distrito, negó a la comunidad cristiana el acceso a una carretera principal que conduce a Kupang, la ciudad donde tendrá lugar en octubre el festival Presparani, un importante evento católico a nivel nacional.
“El jefe del distrito impidió la circulación pacífica, por lo que expresamos nuestra preocupación al gobernador de las Molucas”, explicó Mons. Ngutra. “A los dirigentes del foro interreligioso también se les negó una entrevista con el general Asaddudin”, agregó el clérigo. En los últimos días a los representantes de las diversas religiones del distrito, incluidos los obispos, se les han confiscado los vehículos personales. Los miembros del foro para el diálogo interreligioso ya habían presentado denuncias al respecto al ministro del Interior, Tito Karnavian, y al presidente Joko Widodo.
No es la primera vez que el general Asaddudin se muestra contrario a las actividades de la comunidad cristiana. El presupuesto para el festival Presparani se concedió solo después de muchas presiones, explicó el obispo Ngutra: "Es un buen gesto que el gobierno haya asignado un presupuesto de fondos públicos, pero también me inclino a tener en cuenta los gestos personales del general, que no siempre ha sido muy amable con la comunidad católica”, comentó el prelado. "De hecho, muchas veces ha cuestionado la necesidad de realizar el festival Pesparani y otros aspectos relacionadas con el evento”.
En su momento, el conflicto de las Molucas fue muy violento en las islas de Amboina y Halmahera. Los enfrentamientos comenzaron a raíz de la inestabilidad económica y política tras la caída del gobierno de Suharto, cuando se dividió en dos partes la provincia de las Molucas (Maluku). Las milicias religiosas cristianas y musulmanas se enfrentaron y hubo un gran derramamiento de sangre hasta la firma de los acuerdos de Malino II en 2002.