Anton Abu Akleh: el encuentro con el Papa y la lucha por la 'verdad' sobre Shireen
de Dario Salvi

La familia de la periodista palestina asesinada por un soldado israelí se encuentra con el pontífice al margen de la audiencia general. El hermano dice a AsiaNews: da "fuerza" a la búsqueda de justicia, que es "lo menos que podemos hacer para honrar su memoria". La impresión de "impunidad" del ejército israelí. Shireen "una voz a favor de la paz" silenciada "intencionalmente". P. Ibrahim: la situación es “muy grave”.


Roma (AsiaNews)- Un encuentro “importante y emocionante”, que le da “fuerza” a la lucha “por la verdad y la justicia” que ha emprendido la familia “para honrar su memoria, que es lo mínimo que podemos y debemos hacer”, afirmó Anton Abu Akleh, hermano de Shireen, la periodista palestina asesinada el pasado 11 de mayo por el disparo de un soldado israelí durante un operativo militar en Yenín, Cisjordania. Anton Abu Akleh dialogó con AsiaNews pocos minutos después de su encuentro con el Papa Francisco y el Card. Pietro Parolin al margen de la audiencia del miércoles. Fue un momento intenso y participativo, que nos da fuerza -añadió- en esta batalla "que hemos emprendido en nombre y representación de todo el pueblo palestino".

“Le agradecimos al Papa y al cardenal Parolin [secretario de Estado del Vaticano] por haber planteado la cuestión en la ONU”, dice el hermano. En esa misma oportunidad también resultó herido un colega, Ali al Samoudi. Los dos vestían chalecos antibalas con la inscripción "Prensa" y cascos protectores. A principios de septiembre Israel admitió que había "una alta posibilidad" de que la reportera hubiera sido alcanzada accidentalmente por balas disparadas por el ejército, aunque este último siempre ha negado todas las acusaciones afirmando que había actuado correctamente.

“La búsqueda de la justicia -dice Anton Abu Akleh- es fundamental, también y sobre todo desde una perspectiva de paz, porque no hay paz sin justicia. Para lograr ese objetivo hay que detener la agresión [israelí], la matanza de civiles y periodistas. Para nuestra familia, para nosotros que somos cristianos, es muy importante la cercanía del Papa y del cardenal”. Sin embargo la solidaridad -prosigue- debe ir acompañada de justicia, y los culpables deben responder por sus actos" ante un tribunal "para que no vuelva a ocurrir". Mi hermana fue asesinada por un francotirador israelí "que sabía que estaba atacando a un objetivo civil, pero hasta ahora" el ejército y sus soldados han disfrutado de un clima general de impunidad". “Shireen era una voz por la paz, contra la ocupación, y trabajó para dar voz al sufrimiento de un pueblo". “Por eso -concluye- Israel quiso silenciarla, eliminándola en forma intencional”.

Esta tarde a las 17 horas se celebrará en la basílica de Santa Maria in Cosmedin de Roma, una misa de sufragio por iniciativa del patriarcado greco-melquita de Antioquía y del Alto Comité Presidencial para los Asuntos de las Iglesias de Palestina. La misa será presidida por el archimedrita Chihade Abboud en presencia de sus familiares. También está previsto un encuentro con el cardenal Leonardo Sandri, prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales.

En los últimos meses el ejército israelí ha apoyado en reiteradas oportunidades la tesis del accidente, afirmando que sus hombres actuaron correctamente, aunque admitió al mismo tiempo “la alta probabilidad” de que uno de ellos haya confundido a Shireen Abu Akleh con una militante palestina armada. Por eso pudo haberle disparado, con una mira telescópica que agranda la imagen hasta cuatro veces, desde el interior del jeep blindado en el que iba sentado. Ante la movilización de ONGs y activistas (la familia ha recurrido a la Corte Penal Internacional), Israel admitió el homicidio, pero insiste en la tesis de que fue un "error" y no un acto deliberado.

Mientras tanto, la escalada de violencia en los territorios ocupados no se detiene. El último operativo de las fuerzas de seguridad israelíes terminó ayer con un saldo de seis palestinos muertos, tres de los cuales estaban armados. Otra víctima es un manifestante acribillado a balazos mientras arrojaba piedras a los soldados durante una marcha de protesta. El epicentro es la ciudad de Nablus, donde recientemente se ha formado un nuevo grupo llamado Lion's Den (Guarida de Leones) que está en la mira del ejército israelí (FDI) desde que mataron a un soldado a principios de mes. La Autoridad Nacional Palestina (ANP) acaba de lanzar un llamamiento a una movilización internacional contra Israel, para pedir que se investigue a los "criminales de guerra". Las manifestaciones se multiplican en todos los Territorios y en Nablús se ha convocado un "día de la ira", acompañado de una huelga general.

En la delegación que se reunió hoy con el Papa también estaba presente el p. Ibrahim Faltas, Vicario Custodio de Tierra Santa. “La situación es muy grave y difícil -confirma el sacerdote- tenemos muerto todos los días; desde principios de año ha habido más de 180, de los cuales 47 son niños. Todos estamos muy preocupados, existe el temor de que se salga de control y nadie sabe cómo puede terminar. Vivo en Tierra Santa desde hace 33 años y nunca he visto una situación tan grave”.