El principal impulsor es el presidente uzbeko Mirziyoyev. Seguridad, Afganistán y derechos fueron los temas centrales de la reunión entre los líderes de Asia Central y la Unión Europea. Taskent propone la creación de un comité de cooperación económica entre las dos regiones.
Moscú (AsiaNews) - El presidente de Uzbekistán, Šavkat Mirziyoyev, intervino durante la cumbre celebrada en Kazajstán entre la Unión Europea y Asia Central, pidiendo que se apueste por una mayor integración entre ambas zonas: "La situación regional y global ha cambiado radicalmente, hoy necesitamos un apoyo más activo de los socios europeos para los procesos de integración de Asia Central". Propuso estudiar la aprobación conjunta de un documento político de gran alcance, una "hoja de ruta" para acelerar la aplicación de estrategias comunes.
Mirziyoyev también insistió en coordinar las acciones de los servicios especiales y los organismos de control de la seguridad de Asia Central y Europa con el fin de intercambiar información para luchar conjuntamente contra las numerosas amenazas actuales. Refiriéndose concretamente a la situación en Afganistán, el Presidente uzbeko expresó su preocupación por el agravamiento de la situación humanitaria en ese país durante el período invernal, e hizo un llamamiento a toda la comunidad internacional para que ayude al pueblo afgano.
Otro punto abordado en el informe se refiere a las relaciones económicas entre Uzbekistán y la UE: se propone la formación de un comité de cooperación económica "Unión Europea-Asia Central" a nivel de viceprimeros ministros de todos los gobiernos involucrados. Uzbekistán "tiene previsto ampliar las medidas relacionadas con numerosos cambios", y entre ellas se destaca "la prioridad absoluta de la legalidad, el apoyo integral a las instituciones de la sociedad civil, la garantía de los derechos de las personas y la igualdad de género, la libertad de expresión y la afirmación de las propias convicciones".
Se trató de la primera edición de la cumbre en este formato. En ella participaron los líderes de todos los países interesados (Uzbekistán, Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán y Turkmenistán, y también contó con la presencia de representantes de Azerbaiyán y Afganistán), además del Presidente del Consejo Europeo, Charles Michel. En vísperas de la reunión, cuatro asociaciones humanitarias internacionales se dirigieron a Michel para pedirle que durante el convenio se abordaran "cuestiones críticas" en el ámbito de los derechos humanos, especialmente con los presidentes de Kazajistán y Uzbekistán.
Los días 26 y 27 de septiembre se celebró la reunión conjunta en Astaná; el 28 de octubre, Michel viajó a Taskent, donde confirmó con Mirziyoyev los compromisos anunciados en el encuentro con los demás líderes de la región.