COP27: Acuerdo entre israelíes y jordanos para salvar el Jordán

En la conferencia de la ONU sobre el cambio climático los dos países firmaron una "declaración de intenciones" sobre el histórico río. El objetivo es reducir la contaminación mediante plantas de tratamiento y mejorando los sistemas de desagüe. A eso se suma la promoción de la agricultura sostenible y la reducción del uso de pesticidas.

 


Jerusalén (AsiaNews) - Israel y Jordania han llegado a un acuerdo en materia de medio ambiente destinado a la protección y recuperación del río Jordán, el histórico curso de agua que comparten los dos países  -donde tuvo lugar el bautismo de Jesús- víctima de una constante pérdida de caudal. La firma de la "declaración de intenciones" se llevó a cabo ayer entre las dos delegaciones que participan en la Cop27, la conferencia  internacional de la ONU sobre el cambio climático que se desarrolla en Sharm El-Sheikh, Egipto.

Por el momento no se conocen los detalles y ni siquiera está claro de qué manera los dos gobiernos se proponen trabajar juntos para salvar el río. Sin embargo, la información inicial filtrada por Israel revela el propósito común de "intentar reducir" la contaminación del curso de agua mediante la construcción de plantas de tratamiento de aguas residuales y la mejora de los sistemas de desagüe. El objetivo es evitar que las ciudades situadas a lo largo del río viertan aguas residuales sin tratar en su cauce.

La declaración de intenciones también tiene como objetivo promover la agricultura sostenible, controlando las escorrentías de los campos agrícolas y reduciendo el uso de pesticidas. La ministra de Protección Ambiental de Israel, Tamar Zandberg, explicó que “la limpieza de contaminantes y elementos peligrosos, la restauración del caudal de agua y el fortalecimiento de los ecosistemas naturales nos ayudarán a prepararnos y adaptarnos para la crisis climática”. Sin embargo, el plan podría no llegar a tiempo con respecto al límite máximo real considerando que, según las últimas estimaciones de Amman, el caudal del Jordán se ha reducido a un mísero 7% en comparación con los volúmenes del pasado.

La agencia oficial de noticias de Jordania, Petra (Jordan News Agency) informó que el proyecto también se propone aumentar el suministro de agua y crear oportunidades de trabajo "para los que viven a ambas márgenes del río Jordán, incluidos los palestinos". El acuerdo fue acogido positivamente por EcoPeace Middle East, un grupo ambientalista transfronterizo que promueve la cooperación entre Israel, Jordania y Palestina en el tema del agua. En una nota explica que representa “una medida crítica de adaptación al clima que puede ayudar a recuperar el 50% de la biodiversidad perdida debido a décadas de contaminación y desvío del agua dulce”.

En los últimos días, siempre en el marco de la COP27, los dos países también renovaron el acuerdo de “energía a cambio de agua”, gracias al cual Jordania suministra energía solar a Israel a cambio de agua potable para el reino hachemita.

Desde hace años la protección del Jordán es tema de debate internacional y una señal de alarma para expertos y ambientalistas. La emergencia es cada vez más grave debido al aumento progresivo de las temperaturas, que han acelerado el proceso de evaporación. Esta situación ha afectado incluso al Mar Muerto, porque las aguas del río ya no son suficientes para mantener estable y constante el nivel del mar. El Jordán había quedado reducido a poco más que un arroyo tras un proceso de degradación que comenzó en la década de 1960, cuando Israel, Jordania y Siria comenzaron a desviar el curso del río utilizando alrededor del 95% de su caudal para disponer de agua potable y satisfacer las necesidades de los sectores agrícola e industrial. Solo el estado judío ha extraído durante mucho tiempo cerca del 60% del agua, con resultados dramáticos para el Mar Muerto y toda la región.