Con la atención puesta en Qatar, Riad decapita a 12 presos por drogas

La comunidad internacional ataca a Doha por el tema de los derechos, pero los sauditas ejecutan a detenidos por delitos no violentos a pesar de las promesas de bin Salman. La ejecución número 13 está prevista en menos de dos semanas. Entre los condenados a muerte también hay presos que confesaron bajo tortura.

 


Riad (AsiaNews) - En los últimos 10 días Riad ha ejecutado al menos a 12 personas, previamente condenadas por delitos relacionados con las drogas y en su mayoría inmigrantes extranjeros. Mientras los focos de la comunidad internacional y de los movimientos activistas están centrados en Qatar, donde acaba de comenzar el Mundial en medio de polémicas y denuncias -tardías, por otra parte- de violaciones de derechos humanos, en el reino wahabita vuelve a actuar el verdugo. Y lo hace mientras la opinión pública está centrada en el vecino emirato, donde la selección saudita logró ayer un histórico e inesperado triunfo ante Argentina, celebrado con una fiesta nacional y mensajes de "felicitación" de los hutíes (rivales en Yemen) y Hamás.

La noticia de las últimas ejecuciones se conoció a través de la ONG Reprieve, que acusa explícitamente a Riad de explotar el hecho de que la atención del mundo está concentrada en el fútbol para encubrir otra vulneración de derechos y la "locura homicida" que se esconde tras el uso extensivo de la ejecución por decapitación. Y mientras tanto el príncipe heredero -y desde hace pocas semanas primer ministro- Mohammed bin Salman (MBS) había prometido limitar esa forma de castigo excluyendo los delitos no violentos.

Todas las personas ejecutadas, prosigue la ONG, habían sido condenadas por delitos relacionados con las drogas -tráfico o consumo- y ninguna de ellas había cometido violencia contra otra persona. La directora de Reprieve, Maya Foa, también advierte que el número de ejecuciones podría aumentar pronto a 13, porque un condenado a muerte se encuentra a la espera de ser ejecutado en los próximos días.

El grupo activista cuenta la historia del taxista Hussein Abo al-Kheir: "Mientras Mohammed bin Salman ocupaba un lugar central en la ceremonia inaugural de la Copa del Mundo, sentado junto al presidente de la FIFA, Gianni Infantino, Hussein Abo al-Kheir -subraya- estaba acurrucado en una celda, aterrorizado porque el verdugo vendría muy pronto a buscarlo”. Foa ataca a Arabia Saudita que "está llevando a cabo una horrible serie de ejecuciones mientras todos los ojos están puestos en el fútbol" matando a "personas como Hussein, un hombre inocente que fue torturado por la policía saudita para que 'confesara'". Riad, concluye, "ha ejecutado a más personas que nunca en los primeros seis meses de este año, y ahora ha comenzado a ejecutar a drogadictos, en gran número y en secreto, mientras el mundo se concentra en su vecino".

Según estimaciones de Reprieve, que recopiló datos sobre las ejecuciones de esta semana, la mayoría de los acusados ​​fueron decapitados con una espada. Tres de los hombres ejecutados eran paquistaníes, cuatro sirios, dos jordanos y tres sauditas. Por último, fuentes locales hablan de otro hombre, de nacionalidad jordana, que habría sido trasladado a otra ala de la prisión donde se encuentra recluido a la espera de la ejecución de la pena de muerte, que debería llevarse a cabo el próximo 25 de noviembre.

En marzo Riad había ajusticiado a 81 personas en un solo día. Las últimas ejecuciones elevan a por lo menos 132 el total de personas que fueron ejecutadas en Arabia Saudita en 2022, lo que ya supera suma de los que acabaron en manos del verdugo en 2020 y 2021. Cabe recordar que, en el primer año de la pandemia, la emergencia sanitaria mundial había frenado las ejecuciones.