La denuncia está contenida en el último informe de Reprieve y la European Saudi Organisation for Human Rights. Entre 2010 y 2014 hubo un promedio de 70,8 ejecuciones por año; entre 2015 y 2022, tras el ascenso del príncipe heredero, la media saltó a 129,5. El uso de la tortura en las cárceles es "endémico" incluso con los menores.
Riad (AsiaNews) - Desde que llegó al poder el príncipe heredero, y actualmente también primer ministro, Mohammed bin Salman (MBS), celebrado por su visión "reformista" del reino wahabita en clave liberal y moderna, Riad ha casi duplicado las ejecuciones. La evaluación está contenida en el informe que publicó recientemente el grupo activista Reprieve, que acusa a los aliados de Arabia Saudita de ser "incapaces" de limitar el recurso al verdugo y la práctica de las ejecuciones masivas. La aplicación de la pena capital se ha duplicado desde 2015 con más de 1000 personas ejecutadas en siete años, confirmando una tendencia que comenzó tras el ascenso como número dos del hijo del rey Salman.
Según los datos estudiados por Reprieve y ESOHR (European Saudi Organisation for Human Rights), entre 2010 y 2014 el promedio en Arabia Saudita era de 70,8 ejecuciones por año. Desde 2015 -año en el que el príncipe heredero se convirtió en el gobernante de facto del reino- hasta 2022 hubo una media de 129,5 ejecuciones por año, lo que supone un incremento del 82% respecto al período anterior.
Al mismo tiempo los autores del estudio denuncian el grado de profundo secretismo que mantiene el reino en torno a los juicios y la aplicación de la pena de muerte, citando el caso de las 81 personas ejecutadas masivamente el 12 de marzo de 2022. Por un lado, explican los grupos activistas, fue el tercer caso de homicidios grupales perpetrados bajo bin Salman y, por otro lado, solo 12 condenas de las 81 personas ejecutadas estuvieron documentadas en los procesos judiciales. "Los 69 hombres restantes -dice ESOHR- fueron juzgados, condenados y ejecutados en absoluto secreto" y el número total de ejecuciones podría estar "muy subestimado".
Reprieve y ESOHR añaden que desde 2013 han sido ejecutadas al menos 15 personas que eran menores de edad en el momento de cometer el delito. De estos, 11 fueron ejecutados después de que Mohammed bin Salman llegara al poder. El informe también documenta que Riad ha utilizado la pena de muerte de forma generalizada y "desproporcionada" contra no sauditas. En efecto, aproximadamente el 75% de las mujeres ejecutadas entre 2010 y 2021 eran extranjeras y, de ellas, alrededor del 56% eran trabajadoras domésticas. empleadas en las casas de los sauditas ricos.
Por último, el estudio de los datos muestra que la pena de muerte se utiliza de manera habitual para silenciar a disidentes y manifestantes, en violación del derecho internacional según el cual el uso de la pena de muerte es admisible -aunque execrable- sólo para los crímenes más graves. Y en lo que respecta a las cárceles, la práctica de la tortura es "endémica" incluso para los imputados menores de edad.