Colombo hacia la mejora de los indicadores económicos
de Arundathie Abeysinghe

Las reservas de divisas aumentaron un 23,5%. Para los economistas, es el principio del fin de la crisis económica. Aumentan las posibilidades de recibir un préstamo del Fondo Monetario Internacional.


Colombo (AsiaNews) - Las reservas de divisas de Sri Lanka aumentaron a 2.100 millones de dólares en febrero de este año, después de haber caído a 1.700 millones en septiembre de 2022. Según funcionarios del Ministerio de Finanzas, las reservas aumentaron en 400 millones de dólares (o 23,5%) en la primera semana del mes pasado. 

Los analistas económicos Darshani Senanayaka y Sumith Lahandupura explicaron a AsiaNews que "estas estadísticas muestran que la nación isleña está saliendo de un profundo abismo hacia un futuro próspero". En estos momentos, la rupia esrilanquesa también se está apreciando frente al dólar estadounidense".

Sri Lanka se enfrenta a una deuda insostenible y a una grave crisis de la balanza de pagos que repercuten negativamente en los índices de crecimiento y pobreza. Según las últimas previsiones del South Asia Economic Focus, el PIB de Sri Lanka debería disminuir un 4,2% en 2023.

A principios de 2022, se anunció la suspensión temporal de una parte de la deuda externa debido a la grave escasez de divisas y se tomaron medidas para consolidar la deuda pública previendo un acuerdo de financiación con el Fondo Monetario Internacional (FMI). 

Hacia finales del año pasado, la política monetaria de Sri Lanka se endureció con un ajuste sin precedentes de las tasas de interés para evitar que se agravaran las presiones inflacionarias. Estas medidas garantizaron la disponibilidad de divisas para importar bienes básicos, como combustible, carbón, gas de cocina, medicinas y alimentos, aliviando, al menos parcialmente, las necesidades socioeconómicas.

Los funcionarios del Banco Central de Sri Lanka (CBSL) creen que "la economía del país se recuperará en el segundo semestre de 2023. Debido a los impedimentos económicos estructurales que existen desde hace décadas, agravados por los shocks económicos y las desafortunadas decisiones políticas, Sri Lanka se enfrenta a su peor crisis económica desde la independencia, al menos hasta principios de 2022".

Después de una contracción real de alrededor del 8% el año pasado, se espera que la economía nacional "se recupere gradualmente en la segunda mitad de 2023 y continúe con su impulso de crecimiento en el futuro", continuó el CBSL.

Según los expertos Sampath Amaraweera y Sachintha Madugalla, "el CBSL necesita liquidez para devolverle el dinero al FMI y a otros prestamistas una vez que se apruebe un acuerdo a finales de marzo o principios de abril. A diferencia de otros ‘rescates’, los programas del FMI se rigen por políticas estrictas, como detener la impresión de dinero y reducir el crédito interno aumentando los impuestos, al tiempo que se mantiene el equilibrio del sector exterior. Tanto los tipos de cambio flotantes como los constantes funcionan según el mismo principio: las entradas y salidas coinciden y las ventas de reservas no generan más flujos de salida, lo que anima a la nación a vivir por encima de sus posibilidades".