El obispo de Jabalpur corre el riesgo de ser detenido debido a las acusaciones de fraude contra un albergue para niños tribales. La diócesis de Jhabua se ve obligada a pedir protección para las celebraciones de Semana Santa. El arzobispo emérito de Bhopal a AsiaNews: "Están utilizando el martillo y las tenazas contra nosotros. Pero es también una manera de frenar la emancipación de los más pobres".
Bhopal (AsiaNews) - "El presidente de la Comisión nacional para la protección de los derechos de los niños (NCPCR) Priyank Kanoongo persigue con martillo y tenazas a las instituciones cristianas. A fuerza de inspecciones, encuentra inevitablemente discrepancias y de ahí saca a relucir casos completamente inventados sobre conversiones y presuntos abusos de menores". El arzobispo emérito de Bhopal, mons. Leo Cornelius, denunció así a AsiaNews la situación de grave tensión en torno a la cual la comunidad católica del Estado indio de Madhya Pradesh vive actualmente las celebraciones de Pascua.
Lo más grave es la amenaza de arresto que pende sobre la cabeza del obispo de Jabalpur, mons. Gerald Almeida, que - junto con el responsable de un albergue de la diócesis - está siendo formalmente investigado desde hace algunos días, acusado de fraude. La investigación es el resultado de otra inspección ordenada por el presidente de la Comisión de Derechos del Niño, que es originario de Madhya Pradesh y creció en la Rashtriya Swayamsevak Sangh (RSS), la organización más conocida de la galaxia del nacionalismo hindú.
Monseñor Almeida apeló a la Corte Suprema de Madhya Pradesh para que se le concediera anticipadamente la libertad bajo fianza, después de que el Tribunal del Distrito de Dindori rechazara su petición el 31 de marzo. Y estos días, debido a los numerosos feriados de abril, el tribunal está cerrado. El caso estalló pocos días después de que otra acusación en el mismo distrito -en ese caso de abusos sexuales contra unas alumnas- condujera a prisión al director de la escuela del pueblo de Junwani. Otra diócesis de Madhya Pradesh, la de Jhabua, se vio obligada a pedir protección policial para sus celebraciones de Semana Santa debido a las fuertes amenazas concretas por parte de extremistas hindúes.
Mons. Cornelio le explicó a AsiaNews: "En los últimos tiempos, en Madhya Pradesh hubo muchos controles e inspecciones en nuestros albergues para los niños de las tribus, que se han convertido en el blanco de personas que se oponen a las actividades sociales de los cristianos. Gracias al apoyo de benefactores y personas de buena voluntad, gestionamos estos albergues de la mejor manera posible para darles a los niños de las comunidades adivasi oportunidades de formación a través de la educación, algo prácticamente imposible en las remotas zonas rurales donde viven sus familias. Las nuestras son instituciones al servicio de las minorías; nunca les imponemos nuestra religión ni a ellos ni a nadie. Las acusaciones de conversión son infundadas e inventadas. Pero también apuntan en contra de la emancipación de los niños adivasi, para impedir su crecimiento social y su autosuficiencia".
"La Iglesia católica en la India siempre ha servido desinteresadamente a los más pobres, los más débiles, los más vulnerables y los más marginados, sin discriminación de casta y credo. Pero hoy quieren desacreditar la labor de la Iglesia e intimidar y humillar a nuestro personal" concluyó el arzobispo emérito de Bhopal.