En la mira de las organizaciones de protección de la infancia -que desde hace tiempo se muestran especialmente "activas" contra las instituciones educativas cristianas- se encuentra ahora el instituto San Francisco, que lleva más de 150 años trabajando para ayudar a niños solos o discapacitados. Durante la redada se profanó una iglesia, se destruyeron documentos y se confiscaron teléfonos móviles y computadoras. Desde hace al menos tres años, los dirigentes piden que se les reconozcan sus actividades. Las sentencias de los tribunales, ignoradas.
Shampura (AsiaNews) - Otra histórica institución caritativa católica está bajo ataque en Madhya Pradesh, donde el obispo de Jabalpur ya había corrido el riesgo de ser arrestado en las últimas semanas por acusaciones de fraude, y donde se está llevando a cabo una ola de inspecciones por parte de la Comisión para la protección de la infancia con el objetivo de atacar sus actividades. Esta vez, en el punto de mira de la NCPCR y del Child Welfare Committee (CWC) está el orfanato de San Francisco, uno de los principales institutos del distrito de Sagar, que lleva 150 años trabajando por los niños que se quedan solos o que tienen necesidades especiales o discapacidades. En la redada del 8 de mayo, según denunció a AsiaNews el padre Sabu Puthenpurackal, el centro "fue allanado" mientras los agentes y funcionarios profanaron una iglesia, golpearon y detuvieron a dos sacerdotes que más tarde quedaron en libertad bajo fianza, destruyeron computadoras y saquearon un convento.
El asalto de las autoridades al orfanato, que tuvo lugar sin motivo ni aviso previo, se produjo un día antes de una audiencia en el Tribunal Superior de Madhya Pradesh relativa a la solicitud de renovación del registro. Se trata de un caso que lleva ya tres años, en los que las instituciones han obstaculizado el reconocimiento de las actividades y nunca han enviado una respuesta a pesar de las numerosas peticiones planteadas por los dirigentes eclesiásticos.
El registro está "pendiente" desde hace al menos "tres años", confirmó el padre Sabu. “Después de haber pedido información a los servicios competentes sobre el retraso en la renovación del registro en repetidas ocasiones", continuó, "aún no hemos recibido ninguna respuesta". Al mismo tiempo, han surgido cada vez más "falsas acusaciones" sin ningún "fundamento". Las autoridades estatales intentaron llevarse a los niños por primera vez en diciembre de 2021, un abuso contra el cual "presentamos una petición" ante los tribunales y los jueces "fallaron a nuestro favor" manteniendo "el statu quo". Ayer debía celebrarse una nueva audiencia sobre el asunto.
Sin embargo, en las 24 horas previas, el presidente del NCPCR, Priyank Kanoongo, y algunos miembros del CWC entraron en el orfanato acompañados por la policía y empezaron a "inspeccionar la zona, confiscando documentos ilegalmente" y sin ninguna orden judicial. Haciendo caso omiso a las sentencias judiciales anteriores, "saquearon las instalaciones, destruyeron archivos y computadoras, confiscaron documentos, teléfonos móviles y computadoras personales, registraron las habitaciones y profanaron el altar de la iglesia". Cuando los sacerdotes se opusieron, primero los golpearon y luego los detuvieron. Lo que hicieron, concluyó, fue "ilegal" e "indignante".