En la región autónoma de mayoría musulmana desplegaron 188.000 efectivos para evitar que se produzcan hechos violentos. Las votaciones en los barangays se llevarán a cabo el 30 de octubre y se espera que sean un evento muy significativo.
Manila (AsiaNews)- La votación para los cargos electivos en los barangays (la unidad administrativa más pequeña, generalmente una aldea) suele ser un acontecimiento de gran resonancia pero también de alto riesgo en Filipinas. Prevista para el 30 de octubre, ya se han desplegado 188.000 agentes de policía. Son elecciones cruciales en la gestión de miles de islas que forman el archipiélago, donde muchas zonas son de difícil acceso y las administraciones locales son a menudo acusadas de corrupción y mala gestión.
Se ha dispuesto una atención especial y una seguridad reforzada para las zonas del sur del país que se encuentran dentro de la región autónoma de Bangsamoro, del Mindanao musulmán, donde la policía contará con el apoyo de unidades militares y paramilitares. El objetivo será mantener el control territorial e impedir manifestaciones de lo que queda de la guerrilla islamista, que a menudo proporciona refugio y espacios de reclutamiento a elementos vinculados al Estado Islámico.
El vocero de la Policía, coronel Jean Fajardo, confirmó el despliegue de fuerzas especiales y agregó que el día de la votación se incorporarán 800 policías más para apoyar a las fuerzas normalmente presentes. Otros 4.400 agentes se están adiestrando para integrar los comités de inspectores electorales que, a diferencia de sus compañeros encargados de la seguridad de los colegios electorales, estarán desarmados.
El principal temor es que, como ya ocurrió en el pasado, se produzcan actos violentos relacionados con la situación política local, que en algunas zonas de la Región Autónoma es especialmente "caliente". La región comprende, junto con las provincias y municipios de la gran isla de Mindanao (Lanao del Sur, Maguindanao del Norte, Maguindanao del Sur, Cotabato City, Marawi), la isla de Basilan (excluida la ciudad de Isabela), el archipiélago de Sulu y la isla de Tawi-Tawi. Estas zonas tienen una población de cinco millones de personas, la mayoría de ellas islámicas, que en su conjunto comprenden 2.590 barangays sobre un total de 42.000 a nivel nacional.