Cardenal Poola: que no se ignoren las partes referidas a los pobres en Dignitatis Infinita
de Card. Anthony Poola*

El arzobispo de Hyderabad reflexiona sobre la cobertura mediática de la declaración del Dicasterio para la Doctrina de la Fe sobre el tema de la dignidad de la persona. "Sólo se habla de teoría del gender, cambio de sexo y maternidad subrogada. Pero la dignidad negada a millones de personas en la India que luchan contra la pobreza, la explotación y la falta de acceso a la atención de la salud no puede dejarnos indiferentes".

 


Hyderabad (AsiaNews)- Detenerse sólo en las cuestiones bioéticas significa ofrecer una lectura parcial (y demasiado cómoda) de la declaración doctrinal sobre los derechos humanos Dignitatis Infinita que publicó el lunes el Dicasterio para la Doctrina de la Fe, afirma el Card. Anthony Poola, arzobispo de Hyderabad, en este comentario que comparte con AsiaNews sobre las reacciones que ha provocado en la India (y no sólo allí) el documento vaticano. “Debemos confrontarnos con estos modelos de pensamiento socioculturales y religiosos que subyacen a las razones por las cuales millones de personas en la India todavía viven en condiciones infrahumanas” y que Dignitatis Infinita pone en tela de juicio. Es significativo recordar que el Card. Poola es el primer indio procedente de una familia dalit (los "parias" o "intocables") que ha recibido la púrpura, en el consistorio convocado en 2022 por el Papa Francisco. Por este conocimiento directo de una forma de negación de la dignidad humana, su testimonio también adquiere un significado especial.

El documento del Vaticano sobre la dignidad humana refleja de manera integral la comprensión de la Iglesia Católica sobre la dignidad de la persona enriquecida a la luz de las enseñanzas y la tradición bíblicas, y las implicaciones que su respeto conlleva en diferentes ámbitos de la vida.

Los medios de todo el mundo y los diarios de la India se han centrado sobre todo en la teoría del gender, el cambio de sexo y la maternidad subrogada; pero la enseñanza doctrinal abarca un terreno mucho más amplio que es necesario explorar. Cuestiones como la pobreza, la migración, la violencia, la trata de personas y los abusos son temas candentes que requieren atención urgente en el contexto indio.

No hay duda de que hoy se niega la dignidad humana a millones de personas en todo el país, que luchan contra la pobreza, la explotación, la discriminación, la falta de acceso a la atención sanitaria y a la educación primaria, la negación de derechos…

Dignitas Infinita nos desafía, sobre todo como Iglesia, a entablar un debate sobre la creciente brecha entre los ricos y los que carecen incluso de lo esencial, sobre los que emigran para escapar y sobrevivir, sobre la normalización de la violencia, sobre aquellos que viven en las periferias y cuyas vidas no cuentan.

A la luz de los valores evangélicos debemos confrontarnos con estos modelos de pensamiento socioculturales y religiosos que subyacen a las razones por las cuales millones de personas en la India todavía viven en condiciones infrahumanas, y encontrar maneras de garantizar que su santidad y dignidad sean reconocidas y defendidas.

Hablar de temas importantes pero alejados puede ser fácil, pero no lo es discutir los problemas de los que todos formamos parte. Reflexionar sobre la dignidad de la vida (o la negación) de un migrante que vive en la puerta de al lado o de los pobres del barrio no es fácil, pero la instrucción vaticana nos recuerda que esto también debe estar en el centro de nuestras conversaciones.

La declaración también llama a la Iglesia india a discutir las causas estructurales de la pobreza, la injusticia y la violencia, y a buscar formas de defender la dignidad de millones de personas en nuestros contextos.

(con la colaboración de Nirmala Carvalho)