Líder del movimiento de los pescadores: 20 años de sucesos y desafíos en Sri Lanka

de Melani Manel Perera

Herman Kumara es un activista del Movimiento nacional de los pescadores de Sri Lanka. Entre los sucesos: haber acercado a los pescadores del norte con los del sur; sus instancias presentadas en la agenda política. Amenazas de muerte contra los activistas; diferencias étnicas aún muy profundas.

Colombo (AsiaNews)- Grandes sucesos pero con algunas derrotas y muchas amenazas: haber logrado convertirse en vocero de las necesidades de los pequeños pescadores, pero no logró todavía superar del todo las diferencias étnicas. Es el balance de los primeros 20 años del Movimiento nacional de los pescadores de Sri Lanka (NAFSO), organización que reúne a fieles de cualquier religión. Habla a AsiaNews su coordinador nacional, Herman Kumara, activista católico que se bate para mejorar las condiciones de la población y abate barreras ideológicas, étnicas y religiosas.

El Movimiento celebró su 20° aniversario del 24 al 26 de noviembre. La Asociación, que hoy cuenta con unos 15 mil asociados, nace en 1993 como parte del Social Economic Development Centre (SEDEC) de Caritas. En 1997, se convierte en organización independiente y asume el actual nombre. Desde entonces lleva adelante proyectos para la protección del ambiente, del territorio y de sus recursos; apoya el respeto de los derechos humanos de todos los ciudadanos, con particular interés por las mujeres y los niños.

Primero con pequeños proyectos focalizados sobre las comunidades de pescadores, en el tiempo se convirtió en un centro fundamental para la difusión de una visión de sociedad justa y próspera, donde los recursos sean distribuidos en manera ecua y los derechos humanos garantizados a todos, prescindiendo del credo, raza, género y casta.

Según Kumara, dos son los más importantes sucesos del movimiento: haber alcanzado dimensiones nacionales, tanto como poder representar las necesidades de los pescadores; haber delineado políticas alternativas en tema de pesca.

Como organización multiétnica y multicultural, el NAFSO logró acercar el norte con el sur de la isla, pero no logró del todo superar las discriminaciones y las diferencias étnicas entre los pescadores. Esto, afirma el coordinador, “es el mayor fracaso. Pero por otro lado hemos traído la reconciliación al menos entre nuestros miembros”. No obstante las numerosas amenazas de muerte, intimidaciones, molestias que los activistas reciben comprendido Kumara, “el trabajo continúa. Y yo, como líder católico, hago todo lo mejor posible e intento ser ejemplo para los otros miembros”.