15/11/2022, 16.36
COREA DEL SUR - UCRANIA
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Seúl y la cuestión de las armas para Kiev

de Guido Alberto Casanova

Aunque Corea del Sur es uno de los mayores productores de armas del mundo, el presidente Yoon declara que no proporciona material de guerra a Ucrania sino solo asistencia humanitaria. Investigaciones periodísticas, sin embargo, hablaron de suministro de piezas de artillería vía Washington. La relación con el recrudecimiento de las tensiones con Pyongyang.

 

Seúl (AsiaNews) - Desde que comenzó el conflicto en Ucrania, Corea del Sur abasteció y suministró a Kiev chalecos antibalas, cascos, material médico y muchos otros artículos. Sin embargo el gobierno de Seúl, aunque condena la invasión rusa del país, se ha comprometido a no enviar armamento al escenario de guerra. El mes pasado el presidente Yoon declaró a la prensa que sólo había ofrecido "asistencia humanitaria y pacífica a Ucrania, en solidaridad con la comunidad internacional, pero no armas de guerra" como le había pedido Kiev para defenderse.

El Wall Street Journal reveló hace pocos días, citando fuentes anónimas con conocimiento de los hechos, que bajo el manto de no enviar armas algo se estaría moviendo. A principios de este mes el ministro de Defensa de Corea del Sur, Lee Jong-sup, y su homólogo estadounidense, Lloyd Austin, habrían llegado a un principio de acuerdo sobre la venta a Estados Unidos de 100.000 piezas de artillería de 155 mm, después de que Washington advirtiera en agosto que sus existencias se estaban agotando rápidamente debido a los envíos a Ucrania.

Según esas fuentes anónimas, el acuerdo permitiría a Estados Unidos abastecer a las fuerzas armadas ucranianas sin tener que recurrir a su propio arsenal: se estima que las 100.000 municiones podrían ser suficientes para sostener varias semanas de ofensiva. El Ministerio de Defensa de Corea del Sur no niega que haya tratativas de venta, pero reitera que en las negociaciones entre Washington y Seúl se entiende que el destinatario final de las municiones debe ser Estados Unidos y no Ucrania.

Es sumamente posible que este sea un intento de Corea del Sur de mantener la fachada de su política de no enviar armas. Seúl teme, en efecto, que el apoyo abierto a Kiev pueda significar un mayor apoyo ruso a Pyongyang. El propio Vladimir Putin sugirió esta conexión en octubre, cuando comparó el envío de armas surcoreanas a Ucrania con el envío de armas rusas a Corea del Norte.

En las últimas semanas, además, la creciente tensión en la península coreana por el lanzamiento de misiles de Pyongyang ha favorecido la reanudación de las maniobras militares conjuntas de Washington y Seúl, que poco a poco vuelven a profundizar la cooperación en el ámbito de la defensa. En este contexto, y sobre todo tras el anuncio de Estados Unidos de que Corea del Norte está enviando piezas de artillería a Rusia a través de terceros países, es posible que la política surcoreana de no enviar armas haya sufrido velados ajustes.

Por otro lado, Corea del Sur se está convirtiendo en un importante exportador de armas gracias a la guerra en Ucrania. Este año el gobierno anunció miles de millones de dólares en ventas de armas a Polonia, un país que ha apoyado activamente al gobierno de Kiev para repeler la invasión rusa. Por mucho que Seúl trate de mantenerse fiel a la letra de su compromiso de no enviar armas, el apoyo de Corea del Sur a Ucrania (aunque sea a través de intermediarios) parece ser una realidad cada vez más difícil de negar.

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