Cristianos y no cristianos testimonian un mejoramiento en las condiciones de vida gracias al don de la misericordia. Un propietario de un restaurant estaba “aterrorizado” por las consecuencias del terremoto sobre su actividad, pero con “oraciones y retiros, cada dificultad se ha resuelto”. Misionera de la Caridad: “El dios dinero contra los valores espirituales”.
Katmandú (AsiaNews) – El Año Santo de la Misericordia “es verdaderamente importante para Nepal”. La misericordia está trabajando mucho en pos de la resolución de los problemas. A diferencia de otros países, Nepal está afrontando grandes dificultades respecto al pasado. Por eso, la misericordia de Dios y la oración son fundamentales”. Es lo que dice, a AsiaNews, Binod Gurung, líder laico de la Catholic Society de Nepal, que comenta el valor del Año Jubilar para el país, devastado por el terremoto y afectado por el embargo indio sobre los bienes de exportación, el cual fue recientemente abolido.
La opinión del líder católico es compartida por muchos otros nepaleses, tanto cristianos como no cristianos, que testimonian un mejoramiento real de las condiciones de vida, confiándose en la misericordia divina. Paul Uparkoti, un católico que gestiona un restaurant, refiere: “Estoy observando ese Año santo con oraciones y retiros. Dios me ha donado su misericordia encontrando una solución a todos los problemas”. “El país ha sufrido mucho a causa del devastador terremoto –explica- y durante varios meses ha tenido que afrontar una grave falta de combustible. Pero mi empresa marcha, y yo logro organizar todas las necesidades. El Año de la Misericordia tiene para mí un gran significado y puedo asegurar que, si las personas observaran este período de manera seria, tendrían éxito en todos los campos”.
El manager del restaurante agrega que estaba “aterrorizado por las consecuencias que el terremoto podría haber tenido” en su comercio, pero “cada dificultad se resolvió sin problemas”.
Sor Cluny Tamang, la primera consagrada de la comunidad tamang, está feliz de comenzar su misión justamente en el Año Jubilar. “Ha sido la gracia de Dios lo que me condujo a la misión –dice a AsiaNews- Veía a tantas minorías que sufrían. Muchos a causa del terremoto, tantos otros debido a las consecuencias del embargo. Muchísimas personas persiguen al dios dinero e ignoran los valores espirituales”.
Pero la fe y los valores religiosos, agrega la religiosa que se ha unido este año a las Misioneras de la Caridad, “tienen un gran significado en la vida de la persona. Las raíces de la felicidad y de la paz residen en la práctica verdadera de la fe. Por lo tanto, el Año de la Misericordia significa llevar estos valores a todas las comunidades del país. Yo considero que los valores católicos son verdaderamente importantes para todas las sociedades”.