Card. Gracias: La Amoris laetitia, don enorme para la Iglesia de Asia
de Nirmala Carvalho

El arzobispo de Mumbai y presidente de la Federación de las Conferencias episcopales del continente comenta a AsiaNews la exhortación apostólica: “El texto confirma el magisterio de la Iglesia y de los predecesores de Francisco. Es una importante invitación para los laicos y para los consagrados, que deben estudiarla para obtener un impacto beneficioso en su pastoral”.


Mumbai (AsiaNews) – La exhortación apostólica Amoris laetitia “es un tesoro y un gran don para la Iglesia de Asia, que llega en este momento de gracias que es el Jubileo de la Misericordia. Es preciosa para la Iglesia, pero sobre todo, para las familias y para las sociedades de nuestro continente”. Es lo que dice a AsiaNews el Card. Oswald Gracias, arzobispo de Mumbai y presidente de la Federación de las Conferencias episcopales asiáticas.

El texto, que resume los frutos de los dos Sínodos de la familia celebrados en 2014 y 2015, “confirma la Doctrina Social de la Iglesia y se inserta en un discurso de continuidad con los pontificados de Juan Pablo II y Benedicto XVI. No es de ninguna manera un signo de ruptura en el magisterio católico. Por otro lado, es una invitación a aplicar la medicina de la misericordia con ternura, promover una pastoral inclusiva, y va a la busca de aquellos que están en las periferias”.

El prelado obtuvo en la Gregoriana, en los años de estudio en Roma, un doctorado en derecho matrimonial canónico: “La ‘Amoris laetitia’ subraya con claridad que el matrimonio es una alegría, una bendición y un don de Dios. El Papa Francisco habla de la belleza y de la integridad de este sacramento recordando la famosa primera carta de San Pablo a los Corintios y subrayando que  ‘el amor no es solamente un sentimiento’ (n. 94), sino más bien un compromiso de la voluntad en querer emprender un itinerario definido, afrontando cosas que requieren un compromiso. Ser pacientes, poner a un lado la envidia y las rivalidades. Cuidarse el uno al otro”.

En el contexto asiático “las familias son, tradicionalmente, muy unidas. Es conmovedor que el pontífice conecte las preocupaciones de las familias son las de la sociedad. Hace entender que solamente las familias pueden hacer florecer a las naciones, si los gobiernos logran sostenerlas”.

Es esencial, concluye el Card. Gracias, “que la Iglesia de Asia llegue al corazón de este documento. Obispos y sacerdotes pueden obtener un impacto positivo para el abordaje pastoral: quisiera que en nuestros seminarios éste fuera estudiado, de modo que pueda ayudar en pos de un cambio de mentalidad y un cambio del corazón. Incluir, no excluir, es el deseo del corazón de Jesús. Un don para Asia y la India”.