Cardenal Tagle: 'Sin verdad, justicia y amor no hay paz' ​​con los musulmanes de Marawi

"Sin esa base, no puede haber paz." El conflicto ha entrado en el segundo mes. "Los que lo han maquinado, no han podido dividir los cristianos y los musulmanes." El prelado insta a los filipinos a permanecer "atentos" a los "signos de amor, esperanza y luz" en medio de la violencia. El compromiso de la Iglesia Católica para con los desplazados.


Manila (AsiaNews / CbcpNews) - En relación con la violencia presente en Marawi, el cardenal Luis Antonio Tagle, arzobispo de Manila, llama a los cristianos y los musulmanes filipinos a la unidad contra el extremismo. Desde el pasado 23 de mayo, el grupo terrorista Maute asedia la cudad en la isla de Mindanao, donde se concentra gran parte de la población musulmana de Filipinas. Los choques violentos entre las fuerzas gubernamentales y los militantes han obligado a la evacuación de más de 200 mil personas, creando una grave emergencia humanitaria. Miles de familias están ahora en diversos centros de acogida, en Iligan y ciudades cercanas; muchos otros han preferido buscar refugio con amigos y familiares. Al presidente Duterte, que teme el peligro de tensiones étnico-religiosas,  los líderes musulmanes locales han respondido tomando distancia del extremismo del Maute. La Iglesia Católica, desde las primeras horas de la crisis, ha llamado a la población a la unidad y la solidaridad, la preparación de iniciativas de asistencia a las personas desplazadas y víctimas del conflicto. (Traducción de AsiaNews).

El cardenal Luis Antonio Tagle de Manila, invita a los cristianos y musulmanes en el país a permanecer unidos contra el extremismo. Al compartir su pensamiento sobre el asedio presente en Marawi, declara que las personas, sea cual sea la religión que practica, deben trabajar juntos contra aquellos que quieren solamente la destrucción.

El cardenal dijo que las historias de los musulmanes y los cristianos que se ayudan entre sí pueden formar una base sólida para la recuperación de aquellos que han sido afectados por el conflicto. "Cualquiera que haya conspirado para dividir a los cristianos y los musulmanes - dice el prelado - probablemente ya está enfadado. Fracasó en su intento. De hecho, lo que hemos visto es una comunión".

"Esto es lo que nos da una esperanza real y confirma que pertenecemos a una sola familia humana." El cardenal Tagle invita por lo tanto a los filipinos a permanecer "atentos" a los "signos de amor, esperanza y luz" en medio de la violencia en Mindanao.

El arzobispo de Manila hace hincapié en que la decencia y la humanidad deben seguir para unir a todos los filipinos, diciendo que "la paz sólo puede lograrse mediante la verdad, la justicia y el amor. Sin esa base, no puede haber paz".

Mientras tanto, la Iglesia local de Iligan mantiene su compromiso con las necesidades de miles de familias desplazadas por el conflicto entre las tropas gubernamentales y los grupos terroristas del Maute. El Centro de Acción Social de la Diócesis anuncia que ha distribuido, además de artículos de primera necesidad, ropa y medicamentos, diferentes filtros de agua.

Sin embargo, cuando la crisis ha entrado en su segundo mes, la diócesis informó la necesidad de más asistencia, en particular kits de higiene, mantas, camas de campaña y vajilla; También se afirma que el material de papelería sería una gran ayuda para los niños traumatizados por la guerra.

Caritas Manila envió a la Diócesis de Iligan otro 500 mil Php (8700 euros) para arroz, alimentos y agua. El brazo social de la Arquidiócesis de Manila había enviado anteriormente 500 mil Php y 100 sacos de arroz, como ayuda inicial a los residentes afectados por la crisis de Marawi.