Líder de movimiento independentista condenado a seis años de prisión

Edward Leung participó en los enfrentamientos de febrero de 2016. Se lo acusa encabezar una revuelta. El Card. Zen se cuenta entre quienes reclaman un aligeramiento de la pena.  


Hong Kong (AsiaNews/Agencias) – Edward Leung, quien devino la “cara” visible de los independentistas de Hong Kong, deberá descontar una pena de seis años en la cárcel.  

La sentencia fue emitida hoy por la Alta corte de la ciudad. Leung, de 27 años, fue condenado por el rol desempeñado en las manifestaciones realizadas en el distrito de Mong Kong los días 8-9 de febrero de 2016, marcadas por violentos enfrentamientos entre la policía y los manifestantes. En los días posteriores a la “revuelta de los bocadillos de pescado”, muchos acusaron a las fuerzas de seguridad por el uso excesivo de la violencia, y por haber golpeado incluso a simples peatones.

El tribunal acusa a Leung de haber “participado de manera activa en una revuelta”, y de haberse comportado de manera “brutal” sin motivo. El activista ya ha descontado una pena de un año por haber agredido a un agente de policía, hecho sobre el cual admitió su culpabilidad.  

Junto a él, fueron condenados otros dos activistas partidarios de la independencia: Lo Kin-man y Wong Ka-kui fueron condenados a siete y a tres años y medio de prisión, respectivamente.

Varias personalidades de Hong Kong salieron a defender a Leung, pidiendo un aligeramiento de la pena. A la vanguardia se mostró la ex parlamentaria Margaret Ng Oi-yee. Flanqueando a Ng –quien definió a Leung como un “talento” de su generación –se ubicó el obispo emérito de Hong Kong, el Card. Joseph Zen Ze-kiun, y el representante británico Rodney Elton.

Leung es considerado líder del movimiento “localista”, surgido de las cenizas de la “revuelta de los paraguas”, que tuvo lugar en el otoño del 2014. Producto del descontento popular, el grupo acusa a China de ejercer un creciente control sobre la ciudad, quebrantando el acuerdo firmado en 1997 con el Reino Unido, según el cual la autonomía de Hong Kong deber ser respetada por 50 años.