Chengdu, Iglesia de la Primera lluvia: arrestan a 11 niños, uno de apenas dos meses

La comunidad no oficial fue proscripta, pero los miembros continúan reuniéndose en las casas y la policía conduce operativos violentos. Los niños fueron dejados hambrientos y a la intemperie durante toda la noche.


Chengdu (AsiaNews) – Once niños, entre ellos, un bebé de apenas dos meses, son los prisioneros más jóvenes en manos de la policía de Chengdu (Sichuan): fueron arrestados junto a sus padres –en total, 44 personas- por reunirse en domicilios particulares durante un sábado a la noche, para rezar.

El hecho ocurrió el 24 de febrero y fue anunciado en el perfil de Facebook de la Iglesia de la Primera Lluvia de la Alianza, una comunidad protestante no oficial cuyo pastor, Wang Yi, fue arrestado en diciembre del año pasado.

Si bien la sede de la comunidad fue clausurada, los fieles continúan encontrándose los sábados por la noche en domicilios particulares. Pero ello está prohibido, según los nuevos reglamentos que rigen sobre las actividades religiosas. Es por eso que todos los fines de semana algunos fieles terminan presos y arrestados, para luego ser liberados.

El 24 de febrero pasado arrestaron a 44 fieles, que permanecieron en prisión hasta el día siguiente. Hasta los niños tuvieron que dormir sobre el suelo helado, y no se les brindó nada de comer. En la estación de policía, uno de los miembros de la Iglesia, Tang Chunliang, y su esposo, fueron golpeados por la policía.

El 2 de marzo pasado sucedió un hecho similar. De acuerdo con los testimonios difundidos a través de Facebook, a las 9 de la mañana del día 2 de marzo, “la hermana Xing y el hermano Liu de la Iglesia de la Primera Lluvia de la Alianza fueron arrestados por la policía de Chengdu” cuando visitaban a otros fieles. Los llevaron a la estación de policía de Taisheng, los interrogaron y los golpearon. Siete u ocho policías continuaron “humillando, abusando y golpeando [a los fieles] con violencia”. A las 10 de la noche fueron llevados a casa. Ahora, Xing y Liu (v. foto 2) se esperan que la policía convenza al dueño de la casa que ellos alquilan, para que interrumpa el contrato de alquiler y los desaloje del departamento. En efecto, los nuevos reglamentos prevén que quien de hospitalidad a grupos religiosos no oficiales sufra la expropiación de su propiedad.

La comunidad de la Primera Lluvia tiene unos 500 miembros y 300 simpatizantes. Para ella, los arrestos y redadas no son ninguna novedad. En junio del año pasado, su sede fue clausurada porque la comunidad quería recordar con un servicio fúnebre a las personas asesinadas en la masacre de Tiananmen. Algunos de sus miembros fueron arrestados en octubre por evangelizar en las inmediaciones de la estación de  Chengdu.

Pocos días después de su arresto, se difundió una carta del pastor, Wang Yi, en la que denuncia la falta de libertad religiosa en China y reivindica el carácter no violento de la fe de su comunidad.