En Sri Lanka existen 7 mil templos que practican el budismo Theravada. Las elecciones presidenciales se realizarán el 7 de diciembre. Secretario Caritas: “Falta de confianza en la dirigencia e inestabilidad gubernamental podrían ser la ocasión para los monjes. Sin embargo la población jamás votó por ellos”.
Colombo (AsiaNews)- El jefe de un grupo radical budista lanzó un pedido a los monjes y a los fieles de Sri Lanka para que creen un “gobierno budista”. Ayer Galagoda Aththe Gnanasara,jefe carismático del Bodu Bala Sena (BBS), habló frente a miles de seguidores reunidos en Kandy. En el encuentro invitó a los 7 mil tiempos estarcidos en la isla a “conquistar 10 mil votos cada uno para los candidatos de la mayoría budista”.
Las declaraciones del monje extremista arriesgan agregar gasolina al fuego en un país todavía conmovido por los atentados de Pascua. A AsiaNews el p. Mahendra Gunatilleke, secretario nacional de Caritas Sri Lanka, afirma: “La iniciativa del monje suscitó preocupaciones entre las comunidades de minorías, porque en el caso en el caso debiese ganar, todo lo que hemos conquistado- democracia constitucional, independencia, respeto de los derechos- podría ser debilitado”.
El próximo 7 de diciembre se realizarán la elecciones presidenciales en Sri Lanka, si bien de diversas partes llegó el pedido de postergar la cita electoral, después de las masacres del 21 de abril. La isla fue marcada también por una profunda crisis constitucional a fines de 2018, que minó las raíces mismas de la democracia parlamentaria.
Por ahora los principales partidos políticos no revelaron los nombres de los candidatos, pero las hipótesis mayores son por la volver a recandidar al presidente saliente Maithripala Sirisena; como desafiante se presente el Premier Ranil Wickremasinghe, el ex dictador Mahinda Rajapaksa (como jefe de la oposición) o su hermano Gotabhaya, secretario de Defensa del 2005 al 2015, que jugó un rol determinante en la derrota de los rebeldes de los Tigres Tamil durante la guerra civil.
Sri Lanka es un país de mayoría budista. El 70,2% de la población profesa el budismo Therevada; el 12,6% es hindú; el 9,7% profesa el islam y el 7,4% el cristianismo (de los cuales el 6,1% es católico). Recientemente la isla quedó conmovida por los atentados con dinamitas de Pascua, que han provocado la muerte de 258 personas, en su mayoría cristianos. Desde aquel momento surgió la presencia del extremismo de matriz islámica con lazos internacionales, pero los líderes han reafirmado varias veces una neta condena de las violencias.
El monje budista es jefe del grupo extremista que desde 2014 realiza violencias y actos intimidatorios sobre todo contra la minoría musulmana. Hablando frente a una multitud exultante, él no especificó si el grupo budista apoyará a un candidato existente o creará un partido separado. “Hemos hecho nuestros cálculos- dijo-. Todos ahora hablan de una democracia parlamentaria. Si la necesidad del momento es tener un Parlamento democrático, entonces nosotros monjes debemos poseerlo”. Luego agregó: “Si todos nosotros los monjes nos uniremos, podremos ganar con la ayuda de la sotana”.
El secretario Caritas explica que “en el último decenio la política perdió mucha credibilidad a los ojos de la población y de la opinión pública, que jamás vieron satisfechos sus pedidos. Esto, obviamente suscitó movimientos de reacción. No están sólo los radicales budistas: crecen también diversos movimientos de la sociedad civil, movimientos de pueblo y grupo de jóvenes que usan varias plataformas para expresar su propia insatisfacción”.
Sin embargo, según el p. Gunatilleke, “es poco palusible la creación de un grupo político en tan breve tiempo. Creo que la iniciativa del líder budista no sea otra cosa que una movida política para atraer consentimientos y mostrarse más dialógico. la población de Sri Lanka fue siempre pacífica, Creo que sea el monje como las personas que lo rodean, hemos entendido que no lograrán jamás conquistar el corazón de la gente si continuarán con una actitud agresiva. Por esto ahora él se declara disponible al diálogo con las otras comunidades”. Es necesario notar, afirma en conclusión, “que la confianza en la dirigencia política y la falta de estabilidad del gobierno podrían ser una ocasión para los monjes: Sin embargo no creo que esto sucederá, porque el pueblo jamás votó por ellos”.