Riad, nueva represiĆ³n del disenso: arrestados nueve intelectuales y escritores

Alqst refiere de una campaña de arrestos, con allanamientos en las habitaciones privadas en Riad y Medina. Secuestrados computadoras y teléfonos celulares. Otras personas en la mira de las autoridades. Represión “perturbadora” y “vasta” porque afecta a personas que han “abandonado desde hace tiempo” su activismo.

 


Riad (AsiaNews) - La gran mayoría de las personalidades disidentes y de las voces críticas contra la dirigencia en el poder en Arabia Saudita ya está reducida al silencio. Según lo que refiere la Ong independiente Alqst, en el contexto de una nueva campaña de represión lanzada a mitad de noviembre, las fuerzas de seguridad han arrestado a 9 intelectuales y escritores del reino. Las autoridades han efectuado una serie de allanamientos en las  habitaciones privadas en Riad y Medina. Secuestrados computadoras y teléfonos celulares.

En la nota, los activistas de Alqst dicen tener informaciones según las cuales otras personas habrían terminado en la cárcel. Sin embargo, por el momento no hay confirmaciones oficiales sobre sus nombres y por esto no fueron publicados.

Los perfiles de las personas encarceladas se distinguen, en una cierta medida, de aquellas detenidas en el pasado. “Esta nueva ola de arrestos es prácticamente perturbadora- afirma Josh Cooper, director adjunto de Alqst contactado por L’Orient-Le Jour - sobre todo porque la mayor parte de las personas arrestadas han puesto fin a su activismo desde hace muchos años”. Esto hace pensar, agrega, “que estamos frente a una campaña de represión bastante vasta”.

El activista saudita Hala al-Dosari refiere que “la mayor parte” de las personas detenidas “estaban comprometidas en el debate público” durante el período de las revueltas árabes, entre 2011 y 2013. Fouad al-Farhan fue arrestada “por su obra intelectual”, mientras que Souleiman al-Nasser “por las opiniones expresadas”. Según Ali Adubisi, director de la European-Saudi Organization for Human Rights, “las autoridades sauditas quieren asegurarse que no puede suceder nada en el futuro. Cualquiera hay escrito o reaccionado en favor de los acontecimientos de 2011 (la Primavera árabe) o a favor de los derechos humanos es un posible objetivo”.

En el reino saudita rige una monarquía absoluta sunita, regida por una visión wahabita y fundamentalista del islam. Las reformas introducidas en los últimos años por el príncipe heredero Mohammad bin Salman (Mbs) han tocado la esfera social y los derechos, entre los cuales el permiso para conducir a las mujeres y el acceso (controlado y en especiales sectores) a los estadios. Sin embargo, los arrestos de altos funcionarios y empresarios, la represión de activistas y voces críticas y por último la cuestión Khashoggi hacen sombra sobre el cambio. 

Según diversas Ong y activistas internacionales, el hecho que las autoridades sauditas piensen poder continuar arrestando y reprimiendo a intelectuales y disidentes “en la más completa inmunidad” es un directa consecuencia de una responsabilización por parte de la comunidad internacional. En el momento en el cual la economía se abre al exterior y se introducen (algunas y parciales) reformas a nivel social, la dirigencia de Riad están convencidas que la violenta represión del disenso y de las críticas haga menos sensación.