Xi Jinping felicita a Joe Biden

Era uno de los pocos líderes mundiales que aún no había expresado sus congratulaciones al presidente electo de los EE.UU. Biden solo había recibido vagos elogios del ministerio de Relaciones Exteriores de China. Analistas: Xi se movió después de que Trump dio el visto bueno para comenzar la transición y anunció nuevas sanciones para las empresas de Beijing. 

 


Beijing (AsiaNews/Agencias) – Xi Jinping felicitó ayer al presidente electo de los Estados Unidos, Joe Biden. En un mensaje publicado por la agencia estatal Xinhua, el presidente chino dijo al líder democrático que la comunidad internacional espera relaciones "sanas y estables" entre las dos potencias.

Las felicitaciones de Xi a Biden llegan a casi tres semanas de darse a conocer los resultados electorales, y cuando la mayoría de los gobiernos y el mismísimo presidente en funciones Donald Trump ya autorizó el inicio del proceso de transición. De los países más grandes, y más importantes para Washington, sólo Rusia, México y Brasil no han hecho llegar sus  felicitaciones al candidato demócrata.

De manera bastante vaga, el 13 de noviembre el Ministerio chino de Relaciones Exteriores había declarado que China "respeta la decisión del pueblo estadounidense y felicita a Biden y Kamala Harris [la vicepresidente electa]". Al mismo tiempo, subrayó que el gobierno chino es consciente de que los resultados de la votación "se verificarán de acuerdo con las leyes y procedimientos de los Estados Unidos". Beijing aludía a las apelaciones judiciales presentadas por Trump para alterar el resultado de las elecciones.

Según los analistas, las crecientes tensiones con Washington han llevado a la dirigencia china a ser cautelosa con el resultado final de la disputa presidencial en los Estados Unidos. Especialmente con la intención de evitar fricciones con la actual administración antes de la jura del nuevo mandatario el próximo 20 de enero. Hasta el momento los jueces han rechazado todas las objeciones de Trump, quien anunció nuevas sanciones para las empresas estadounidenses que hagan negocios con empresas chinas dedicadas al sector militar. De ahí la jugada oficial de Xi.