Los católicos chinos, alentados por León XIV, miran hacia el futuro
¿Cómo manejará el nuevo Papa la relación entre Beijing y el Vaticano? Los fieles de China continental esperan que los obispos que sean nombrados y aprobados según el acuerdo puedan amar verdaderamente a los fieles y conocer a su rebaño. Que sean competentes en la pastoral y cuenten con el apoyo de los fieles. Solo así el obispo podrá guiar a los fieles a amar a su país y a la Iglesia.
Beijing (AsiaNews) – Desde el fallecimiento del Papa Francisco al día siguiente de Pascua, hasta la elección del Papa León XIV el 8 de mayo y la Misa de inicio de su ministerio el 18 de mayo, los obispos, sacerdotes, religiosas y fieles de la Iglesia en China continental han seguido de cerca las noticias provenientes de Roma. Todos lloraron la muerte del Papa Francisco y rezaron para que los cardenales eligieran un nuevo Papa guiados por el Espíritu Santo. Luego, esperaron con alegría la inauguración del Papa León XIV, preguntándose qué diría, qué haría y cuál sería su visión de la Iglesia.
Afortunadamente, gracias a las redes sociales los fieles pudieron obtener fácilmente información sobre estos temas a través de cuentas que difundieron mensajes y videos cortos en WeChat y los reenviaron a sus propios Moments personales, compartiendo con otros la información relevante. La gente pudo seguir la ceremonia fúnebre del Papa Francisco y el entierro en la Basílica de Santa María la Mayor gracias a un programa de video en vivo con traducción al chino. Posteriormente, a través de estas redes sociales, la gente pudo enterarse de las reuniones del colegio cardenalicio y el cónclave, y ver las fumatas negras y blancas el 7 y 8 de mayo. En plena noche, los sacerdotes vieron la fumata blanca e inmediatamente reenviaron el mensaje a sus Moments de WeChat. “¡Fumata blanca! ¡Fumata blanca!", comentaron con entusiasmo sin saber quién sería el nuevo Papa. La gente estaba muy emocionada, esperando hasta pasada la una de la madrugada, cuando de repente se difundió el "Habemus Papam", “Habemus Papam”, lo que desató la alegría y la emoción de los fieles. Incluso los sacerdotes, que rara vez publican en sus Moments de WeChat, exultaron: "Tenemos un nuevo Papa".
Pronto todos supieron que se llamaba León XIV. Nacido en Chicago, Estados Unidos, y es miembro de la Orden de San Agustín. Fue misionero durante muchos años en Perú, obispo de la diócesis peruana de Chiclayo, superior provincial y superior general de la Orden Agustina. En 2023, se convirtió en presidente del Dicasterio para los Obispos de la Curia Romana. Tiene experiencias misioneras y administrativas ricas y jerárquicas, que van desde las parroquias y las diócesis hasta la Curia romana, y desde provincial hasta general de la Orden. Conoce seis idiomas. Su fe y su doctrina son muy sólidas. Su amor por los pobres es profundo y es hábil en la comunicación. Obtuvo un doctorado en derecho canónico. Quiere la paz junto con la justicia. Todos estos son méritos y cualidades muy valorados por los católicos. Ahora los fieles siguen los mensajes en las redes sociales, tratando de conocer todo lo posible sobre el Papa León XIV, desde su vestimenta tradicional cuando apareció en el balcón de la Basílica de San Pedro hasta sus actividades diarias, como su visita a la sede de la Orden Agustina y su llamado a detener todas las guerras. Los fieles escucharon el llamado a la unidad, la comunión, la reconciliación, la caridad, la paz y la esperanza durante su Misa de inauguración.
¿Cómo encauzará el nuevo Papa la relación entre China y el Vaticano? Este es un tema muy sensible para la Iglesia en China continental. Desde 2018, cuando China y el Vaticano firmaron un acuerdo provisional sobre el nombramiento de obispos, se han llevado a cabo más de diez consagraciones episcopales. Se han registrado algunos obispos que antes no estaban registrados. También hay obispos que han sido trasladados de una diócesis a otra. En la era del Papa León XIV, los fieles esperan que los obispos que se nombren y aprueben según el acuerdo puedan verdaderamente amar a los fieles y conocer a su rebaño. Que sean competentes en la atención pastoral y cuenten con el apoyo de los fieles. Solo de esta manera el obispo podrá guiar a los fieles a amar a su país y a la Iglesia, unir a los fieles, guiándolos activamente hacia la construcción del país, contribuir a mantener la estabilidad social y ser buenos ciudadanos, buenos católicos y producir frutos en la evangelización.
02/09/2021 15:09
08/09/2021 16:01