En el segundo foro celebrado en Kazajistán tras el de Xi'an de 2023, China y los cinco países de la región firmaron 58 acuerdos comerciales con inversiones por valor de más de 24 000 millones de dólares. Entre las prioridades se encuentran las vías de transporte y la energía, pero también el procesamiento de tierras raras. En el plano político, Xi Jinping obtuvo el apoyo en la condena de toda forma de «guerra comercial de aranceles y sanciones».
Un seminario promovido en los últimos días por la representación de la Unión Europea y el Gobierno de Tayikistán ha reunido a políticos, especialistas de las fuerzas del orden y representantes de la sociedad civil para intercambiar conocimientos y reforzar la colaboración con el fin de responder a las crecientes amenazas de acciones violentas con motivaciones extremistas.
Dos meses después de la reapertura de la frontera, ambos países siguen esperando clientes transfronterizos en sus mercados de las zonas fronterizas. La desconfianza y el recelo mutuos se hacen sentir, pero tanto algunos comerciantes como las autoridades siguen convencidos de que habrá un repunte de la economía en poco tiempo
Algunos de los principales grupos del país han formado una red para afirmar que la colaboración es más productiva que la competencia y buscan vías comunes para fortalecer toda la economía del país. Empezando por proyectos sociales como la ayuda a familias con bajos ingresos, el apoyo a escuelas y albergues.
El país tiene un enorme potencial para el desarrollo de la energía solar, pero aún se encuentra al principio de este camino. Así que para calentar agua para el té a menudo es necesario encender un fuego de carbón, a la espera de que llegue algo de electricidad, que siempre está racionada a unas pocas horas al día, especialmente durante el invierno.
Desde el final de la URSS, las cinco antiguas repúblicas soviéticas debaten la posibilidad de abandonar el cirílico y adoptar caracteres latinos. Hay quienes hablan de una mayor aproximación a los sonidos de las lenguas túrquicas, pero la cuestión se entremezcla con las demandas de «desrusificación» con el telón de fondo de la guerra de Ucrania. Pero incluso en Kazajistán, donde Nazarbaev inició el proceso con el objetivo de completarlo en 2031, persisten fuertes dudas.