Las manifestaciones estallaron ayer en la capital nepalí tras el bloqueo de las redes sociales, que hoy ha sido revocado. Sin embargo, el primer ministro Khadga Prasad Oli ha presentado su dimisión. El balance de víctimas es de 19 muertos y cientos de heridos. Antes de la prohibición de Internet, habían circulado noticias que acusaban a los políticos locales de corrupción y nepotismo. Los jóvenes menores de 30 años que salieron a la calle también expresaron su frustración por la falta de oportunidades económicas.
El fin de semana se recuperó el cadáver del trabajador agrícola Nattapong Pinta, fallecido en los primeros tiempos de su cautiverio. El pésame de Bangkok. El pedido de la hermana del prisionero nepalí Bipin Joshi, cuya suerte es incierta. En el frente interno, expectativa por la votación en la Knesset el 11 de junio sobre la disolución del Parlamento; la cuestión del servicio militar para los judíos haredíes está detrás de la crisis.
En el último mes, el país del Himalaya ha sido escenario de manifestaciones en favor de la restauración de la monarquía, donde también han aparecido representaciones de un líder del BJP de la India. Delhi ha expresado reiteradamente su apoyo al rey y a que Nepal vuelva a ser un Estado hindú. Pero muchos creen que las manifestaciones son una forma de expresar el descontento con los partidos tradicionales, que no están cumpliendo sus promesas de prosperidad.
La funcionaria propuesta para el puesto de secretaria general del Ministerio de Sanidad se ha quejado de discriminación tras haber sido rechazada por un colega masculino en el nombramiento decidido por el gobierno. Marginada por el ministro por ser mujer y madheshi». Polémica en el Parlamento y en las redes sociales.
Por primera vez en una década, el gobierno nepalí aumenta la tasa para alcanzar el pico más alto del mundo. En la temporada de verano, habrá que desembolsar hasta 15.000 dólares, un aumento sustancial respecto a los 11.000 dólares exigidos hasta ahora. Las tasas de otoño e invierno también aumentan. Los escaladores esperan que el dinero se invierta en el medio ambiente y seguridad.
Israel celebra la liberación de Romi Gonen, Doron Steinbrecher y Emily Damari como parte de la frágil tregua. Sin embargo, el destino de los trabajadores extranjeros que siguen secuestrados en la Franja sigue siendo un misterio. Entre ellos hay seis tailandeses y un nepalí, sobre cuya suerte no ha trascendido nada ni siquiera durante las negociaciones de los últimos días. Las familias temen que «todo se venga abajo» antes de su regreso.