P. Rifat: Gaza, droga y Estados rivales, los frentes 'calientes' contra el muro de Ammán

de Dario Salvi

El ataque a la Torre 22 y las bajas militares estadounidenses vuelven a situar al país en el centro de los acontecimientos regionales. Una fuente libanesa de AsiaNews habla de "cruzar una línea roja". Sacerdote jordano: situación "complicada", pero la unidad entre el pueblo y sus dirigentes es un factor de estabilidad. La paz en Tierra Santa y un Estado palestino son la única manera de extinguir los focos del conflicto.

Milán (AsiaNews)- El frente norte de Jordania es desde hace mucho tiempo escenario de una "guerra abierta", sobre todo contra las "milicias de la droga" que trafican sustancias derivadas del captagon desde Siria hacia los mercados de Europa o entre los países del Golfo. Sin embargo, en el ataque a la base militar que dejó un saldo de tres soldados estadounidenses muertos y fue "condenado" incluso por Ammán, la cuestión del tráfico de estupefacientes se superpone al del conflicto en la región y a las represalias por la presencia de soldados estadounidenses. El P. Rifat Bader, director del Centro Católico de Estudios y Medios de Comunicación (CCSM) y director del sitio católico de noticias abounga.org, una de las personas más autorizadas de la Iglesia en Jordania, comenta el ataque a la "Torre 22" y analiza el rol del reino hachemita en los conflictos de Oriente Medio. "La situación se ha complicado en los últimos tiempos - explica a AsiaNews el sacerdote jordano del Patriarcado latino de Jerusalén - y se ha agravado el conflicto abierto con estas milicias vinculadas a Estados que no tienen 'buenas intenciones' con respecto a Jordania. Pero hasta ahora el país se ha mantenido firme y ha hecho frente a las incursiones, aunque el ataque a la base estadounidense abrió una brecha en el muro defensivo.

Torre 22

La Torre 22 fue el objetivo del ataque de la madrugada del 28 de enero, en el que murieron tres soldados estadounidenses: William Jerome Rivers, de 46 años, Breonna Alexsondria Moffett, de 23, y Landon Sanders, de 24. A ellos se suman decenas de heridos, alcanzados por un dron que eludió los dispositivos de protección de la base militar en territorio jordano, aunque Ammán inicialmente declaró que se encontraba del otro lado de la frontera, en Siria. En realidad la base estadounidense, de importancia estratégica porque ha sido utilizada en los últimos años para "observar" los movimientos de las tropas de Damasco en la guerra y de las milicias yihadistas activas en la zona, se encuentra en el extremo noreste, junto la frontera del reino hachemita con Siria e Irak. Poco se sabe sobre la base, ya que está envuelta en un aura de misterio, pero incluye apoyo logístico y tiene cerca de 350 soldados y oficiales del Ejército y la Fuerza Aérea de los EE. UU.

También está cerca de la guarnición de al-Tanf, situada del otro lado de la frontera, en Siria, donde también hay una pequeña representación de soldados estadounidenses para la lucha contra el Estado Islámico y la contención de la influencia iraní. Es oportuno señalar el sólido vínculo entre Washington y Ammán, cuyo ejército es uno de los principales beneficiarios de la financiación militar extranjera estadounidense, además de haberle proporcionado asistencia logística y entrenamiento militar con reiterados ejercicios a lo largo del año. Desde que comenzó el conflicto sirio en 2011, la Casa Blanca -independientemente del presidente en ejercicio- ha destinado cientos de millones de dólares para establecer un elaborado sistema de vigilancia. El proyecto se conoce como Programa de Seguridad Fronteriza y su objetivo es frenar la infiltración de militantes de Siria e Irak, así como luchar contra el tráfico de drogas. Un muro aparentemente sólido, que ha sido quebrado este fin de semana por un ataque que tomó por sorpresa a los propios soldados, tal como ocurrió en Israel con los milicianos de Hamás el 7 de octubre pasado.

Ammán y la causa palestina

A partir del ataque contra la base estadounidense, el P. Rifat Bader amplía su reflexión al último conflicto que, por orden cronológico, está incendiando Oriente Medio: la guerra lanzada por Israel contra Hamás en Gaza, en respuesta al ataque terrorista contra el Estado judío con su carga de muerte, dolor y destrucción. “En Jordania - dice - no sólo hay una solidaridad genérica con los palestinos, sino que desde el principio ha sido una cuestión política esencial vinculada a la causa de su pueblo, entre otras cosas porque casi la mitad de sus habitantes son refugiados de origen palestino. Este tema constituye una prioridad, y el propio rey Abd Allah II, que hoy cumple 62 años y 25 en el trono, se refiere a ella como "nuestro" problema. Desde el primer día del conflicto en la Franja, "Jordania ha puesto de manifiesto que está totalmente en contra y se ha fijado tres objetivos principales: el alto el fuego, la llegada de ayuda humanitaria y, como último punto, poner fin a la ocupación israelí y encontrar una solución radical para el problema. El cual - añade el sacerdote - ciertamente no comenzó el 7 de octubre sino hace décadas, como dijo claramente el propio monarca: la ocupación israelí debe terminar, se debe permitir a los palestinos vivir en paz, porque la paz en Palestina también será funcional para la seguridad de los israelíes". Desde esta perspectiva, la posición de Ammán es enteramente similar a la del Vaticano, y existe desde hace tiempo un vínculo consolidado y una visión común de intenciones entre ambos, que este año "celebran el trigésimo aniversario de las relaciones diplomáticas". Comenzando por el "estatus especial de Jerusalén, que debe ser también la capital" del futuro Estado palestino.

Los frentes de guerra, la paz en Tierra Santa

Volviendo al ataque a la Torre 22, una fuente libanesa de AsiaNews informa que probablemente no será el evento que encienda la mecha de un conflicto abierto, pero aún así significa que se ha cruzado una línea roja. El presidente estadounidense Joe Biden será llamado a dar una respuesta militar, aunque sólo sea para enviar un mensaje a los votantes estadounidenses que podrían inclinarse por Donald Trump en las próximas elecciones. El objetivo más probable debería ser un centro de interés o una personalidad vinculada a los Guardianes de la Revolución, los pasdaran iraníes, aunque la operación no debería afectar a la República Islámica sino a uno de los países satélites, como ocurrió con Sayyed Razi Mousavi. El peligro de una ampliación del conflicto y de que Jordania quede involucrada no es irreal ni remoto, pero "estamos viviendo la situación con relativa serenidad - explica el p. Rifat - porque podemos contar con un ejército y un alto nivel de protección. Lo que pasó hace dos días, en la frontera siria, tiene más que ver con la seguridad y la inteligencia, que tiene puntos débiles, pero el país tiene un gobierno sabio y fuerte [a nivel de rey y ministro de Relaciones Exteriores]. Además, tenemos lo que se llama el petróleo de Jordania: la unidad nacional, que obra milagros en términos de estabilidad" en estos tiempos tormentosos, porque es el resultado del fuerte vínculo "entre el pueblo y sus líderes".

Garante de la libertad religiosa, custodio de los lugares santos de Jerusalén, uno de los primeros en iniciar un camino de diálogo con la institución de la semana (la primera de febrero) de la armonía entre las religiones promovida en la ONU en 2010, el país observa atentamente la evolución de la situación. “Cuando Ammán se negó a recibir a la población de la Franja - señala el p. Rifat- no lo hizo porque estuviera en contra de sus habitantes, sino para hacer lo posible para que permanecieran en su tierra y evitar una nueva naqba, como ocurrió en el '48 y el '67". “El problema palestino - continúa - complica muchos de los escenarios que inflaman hoy al mundo. En muchas capitales occidentales se ven manifestaciones populares, mientras los dirigentes apoyan la guerra de Israel en Gaza. La esperanza es que la voz de los pueblos occidentales llegue a sus líderes y que estos presionen a Israel para que ponga fin al conflicto. Aquí, en cambio, hay unidad de propósito entre ciudadanos y dirigentes, sobre todo porque el peligro de violencia está constantemente presente. Para extinguir estos focos que van desde Yemen hasta Siria, pasando por Iraq, el Líbano y la Franja - concluye - es necesario encontrar la solución definitiva a la cuestión palestina. Un paso fundamental para que realmente haya paz en el mundo".

“PUERTA DE ORIENTE” ES EL BOLETÍN DE ASIANEWS DEDICADO A ORIENTE MEDIO. ¿QUIERES RECIBIRLO TODOS LOS MARTES EN TU CORREO ELECTRÓNICO? SUSCRÍBETE AL BOLETÍN EN ESTE ENLACE