Papa: que las mujeres participen más en las instituciones responsables de la Iglesia
Carlo Acutis, un muchacho de 15 años beatificado ayer, “muestra a los jóvenes de hoy que la verdadera felicidad se encuentra poniendo a Dios en primer lugar y sirviéndolo en los hermanos, especialmente en los últimos”. “Que se renueve la tregua entre Armenia y Azerbaiyán”.
Ciudad del Vaticano (AsiaNews) - Oremos para que "los fieles laicos, especialmente las mujeres, participen más en las instituciones de responsabilidad de la Iglesia, evitando caer en clericalismos que anulan el carisma laical". El Papa Francisco hizo esta invitación después del Ángelus, cuando también alentó a "reanudar" la tregua entre Armenia y Azerbaiyán y recordó la beatificación de Carlo Acutis, un adolescente de 15 años a quien señaló como "modelo" para los jóvenes de hoy.
En una jornada lluviosa y antes de recitar la oración mariana, Francisco se dirigió a los varios miles de personas presentes en la plaza de San Pedro para comentar el pasaje del Evangelio de hoy que refiere la parábola del banquete de bodas. Subrayó que dos veces en la historia el rey envía a sus siervos a llamar a los invitados "pero ellos se niegan, no quieren ir a la fiesta, porque tienen otras cosas en que pensar". “Muchas veces - reflexionó - nosotros también anteponemos nuestros intereses y cosas materiales al Señor que nos llama. Pero el rey de la parábola no quiere que la sala quede vacía, porque quiere regalar los tesoros de su reino, y extiende la invitación hasta los que están más lejos, "sin excluir a nadie", porque "nadie está excluido de la casa de Dios". De hecho, el rey dice: “Llamen a todos, buenos y malos. ¡A todos!". "Dios también llama a los malos".
Y también la Iglesia "está llamada a llegar hasta los cruces de caminos de hoy, es decir, hasta las periferias geográficas y existenciales de la humanidad", todos aquellos lugares donde viven "jirones de humanidad sin esperanza". “Se trata de no quedarse en las formas cómodas y habituales de evangelización y testimonio de caridad, sino de abrir las puertas de nuestro corazón y de nuestras comunidades a todos, porque el Evangelio no está reservado a unos pocos elegidos. Incluso a los que están en los márgenes, incluso a los rechazados y despreciados por la sociedad, Dios los considera dignos de su amor ”.
Al terminar el Ángelus, Francisco dijo que "apreciaba que Armenia y Azerbaiyán hubieran acordado un alto el fuego por razones humanitarias, con miras a alcanzar un acuerdo de paz sustancial. Aunque la tregua resulta demasiado frágil, animo a que se reanude y expreso mi cercanía en el dolor por la pérdida de vidas humanas, los sufrimiento padecidos, y también la destrucción de hogares y lugares de culto. Rezo e invito a rezar por las víctimas y por todos aquellos cuyas vidas se encuentran en peligro”.
“Ayer, en Asís - dijo después - fue beatificado Carlo Acutis, un muchacho de quince años enamorado de la Eucaristía. Él no se instaló en una cómoda inmovilidad sino que comprendió las necesidades de su tiempo, porque en los más débiles veía el rostro de Cristo. Su testimonio muestra a los jóvenes de hoy que la verdadera felicidad se encuentra poniendo a Dios en primer lugar y sirviéndole en nuestros hermanos, especialmente en los últimos”.
El Papa recordó entonces “la intención para la oración que propuse para este mes de octubre, que dice: 'Oremos para que los fieles laicos, especialmente las mujeres, participen más en las instituciones de responsabilidad de la Iglesia'. Porque ninguno de nosotros ha sido bautizado como sacerdote u obispo: todos hemos sido bautizados como laicos y laicas. Los laicos son protagonistas de la Iglesia. Hoy es necesario ampliar los espacios de una presencia femenina más incisiva en la Iglesia. Y de una presencia laical, por supuesto, pero enfatizando el aspecto femenino, porque en general se deja de lado a las mujeres. Hay que promover la integración de las mujeres en los lugares donde se toman decisiones importantes. Recemos para que, en virtud del bautismo, los fieles laicos, especialmente las mujeres, participen más en las instituciones de responsabilidad de la Iglesia, sin caer en los clericalismos que anulan el carisma laical y arruinan también el rostro de la Santa Madre Iglesia”.
"El próximo domingo 18 de octubre - dijo por último - la Fundación Ayuda a la Iglesia que sufre promueve la iniciativa 'Por la unidad y la paz, un millón de niños rezan el Rosario". Aliento a este hermoso evento que involucra a niños de todo el mundo que rezarán especialmente por las situaciones críticas provocadas por la pandemia”.
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