Francisco entre los participantes en el Jubileo de los enfermos, en silla de ruedas y con oxígeno: '¡Feliz domingo a todos! Muchas gracias'. En el Ángelus otro llamamiento: «Silenciar las armas, reanudar el diálogo». Oración por la paz en Ucrania, Gaza, Sudán y otros lugares de conflicto: «Víctimas civiles, entre ellas muchos niños». Acción de gracias al personal sanitario e invitación a confiar en Dios, que «no nos deja solos» ni siquiera en la enfermedad.
En el texto del Ángelus expresó su "preocupación" por Sudán del Sur, donde se ha derogado el acuerdo de paz de 2018: "Hay que dejar de lado las diferencias". En Sudán, "espantosa catástrofe humanitaria", que la comunidad internacional "aumente los esfuerzos". Pidió la paz en Ucrania, Palestina y Myanmar, que "también está sufriendo por el terremoto". A los Misioneros de la Misericordia: "El perdón es fuente de esperanza".
El estado de Bergoglio, hospitalizado en Roma desde el 14 de febrero, «permanece estable». «Estoy afrontando un momento de prueba, y me uno a tantos hermanos y hermanas enfermos», dijo hoy en el texto del Ángelus. El recuerdo de los «países heridos por la guerra».
También este domingo se difundió el texto escrito del Ángelus del Pontífice desde el Hospital Gemelli: «Siento en el corazón la bendición que se esconde en la fragilidad, que nos enseña aún más a confiar en el Señor». Francisco agradece la cercanía de los fieles de todo el mundo; su estado clínico, estable. Comentando el Evangelio, la invitación a una mirada de cuidado y palabras honestas hacia los demás.
En el Ángelus, nuevo llamamiento de Francisco a la comunidad internacional para que respete el derecho humanitario en los conflictos que ensangrientan el mundo: «Basta de golpear a civiles, basta de golpear escuelas, hospitales, basta de golpear lugares de trabajo. No olvidemos que la guerra es siempre una derrota».
Hoy, fiesta de la Sagrada Familia, Francisco indicó como “modelo” el núcleo de Nazaret. Después de encontrar a Jesús en el Templo, María «no acusa ni juzga, sino que trata de comprender». Cercanía a las familias de al menos 177 víctimas del accidente aéreo de Muan, en Corea del Sur. Esta mañana se abrió en Roma, en la Basílica de San Juan de Letrán, la tercera Puerta Santa del Jubileo.
En el Ángelus de hoy, primer domingo de Adviento, Bergoglio condenó la guerra. Con respecto al Líbano, pidió que se respete el alto el fuego y exhortó a elegir al presidente. Recordó a Siria, donde Alepo está bajo el control de grupos yihadistas. Y Ucrania, que se acerca a un invierno trágico. El comentario del Evangelio sobre la esperanza: "Dios actúa incluso en los acontecimientos dramáticos".
En la solemnidad de Todos los Santos y de la proclamación de las Bienaventuranzas, "camino a la santidad", el pontífice recordó que la guerra es "despreciable, porque es el triunfo de la mentira". El llamamiento por el Chad, donde se ha producido grave atentado terrorista, y por comunidad valenciana azotada por la DANA, una "catástrofe medioambiental". Recordó también especialmente a las “153 mujeres y niños masacrados hace pocos días en Gaza”.
En la basílica vaticana la celebración conclusiva durante la cual fue expuesta la Cátedra de San Pedro, signo de la unidad de la Iglesia. Difundido el documento final votado por la Asamblea a la que el pontífice no añadirá una exhortación apostólica. Francisco cerca de las poblaciones afectadas por el tifón en Filipinas.
Recordado el viaje apostólico a Asia, que a partir de mañana llevará al pontífice a Indonesia, Papúa Nueva Guinea, Timor Oriental y Singapur. Esta mañana oración y encomienda ante el icono de la Virgen Salus populi romani, en la Basílica de Santa María la Mayor, Roma. Se recuerda la Jornada Mundial de Oración por la Creación: «El grito de la Tierra es cada vez más alarmante».
Francisco en el Ángelus: «Sigamos rezando para que se abran caminos de paz en Medio Oriente, Ucrania y Myanmar». «Que la vida gastada por los hermanos por los mártires de Uvira inspire caminos de reconciliación».
En el día en que la Iglesia celebra la asunción de María a los cielos, el pontífice recordó que la vida no es un camino sin sentido, sino un proyecto de amor. La Virgen es una metáfora de la "peregrinación terrena" y un ejemplo de servicio. Al terminar, volvió a hacer un llamamiento a la paz en Ucrania y Tierra Santa y reiteró su "preocupación" por la situación humanitaria en Gaza y los incendios en Grecia.
En la Basílica de San Pedro se llevó a cabo la solemne celebración, con la entrega del palio a los 42 arzobispos nombrados en el último año. En el Ángelus, el Papa dijo: "Si no es servicio, la autoridad se convierte en dictadura". La Santa Sede difundió los datos del Óbolo de San Pedro del año pasado: se recaudaron 48,4 millones de euros destinados a las obras de caridad del Papa; en Asia financia 33 proyectos.
Tras la oración mariana del Ángelus, el llamamiento a rezar por la paz en Ucrania, Palestina, Israel y el norte del Congo: "Es necesaria la negociación". El recuerdo de los "hermanos franciscanos": "Honran a la Iglesia de Roma". El comentario del Evangelio: Jesús "nos hace valientes".
El llamado del Regina Caeli en nombre del Resucitado "que nos quiere libres". La solemnidad de la Ascensión celebrada hoy en Italia inspira la pregunta: "¿Está vivo en mí el deseo de la vida eterna?". El horizonte de la "sabiduría del corazón" en la Jornada de las Comunicaciones Sociales y la gratitud a todas las madres en su fiesta