Las agencias de la ONU estiman que unos 17 millones de personas se han visto afectadas de alguna manera por el terremoto, el número de muertos, no fiable, asciende a 3700. Temor por la próxima estación de lluvias. Las declaraciones oficiales sobre el alto el fuego han sido desoídas: se han producido cientos de bombardeos en las últimas semanas. Continúa la campaña de recaudación de fondos promovida por la Fundación Pime.
Tres semanas después del terremoto que devastó Mandalay y el centro de Myanmar, la Iglesia permanece junto a los fieles y las víctimas, ofreciendo apoyo material y espiritual. Mientras muchas iglesias siguen inhabitables, la Semana Santa se celebra en los campamentos de refugiados y en los salones parroquiales. Maximilian, voluntario de Caritas, afirma que en la destrucción y el dolor «la gente se apoya mutuamente», en una verdadera experiencia de renacimiento.
Un trabajador cuenta a AsiaNews la situación en las zonas afectadas por el seísmo de finales de marzo: los militares bloquean a menudo los envíos, alimentando el miedo y la incertidumbre. El régimen, ocupado en reconstruir sus oficinas en lugar de llevar ayuda a la población, querría ocultar a los evacuados. No hay un esfuerzo coordinado para extraer los cuerpos de los muertos de entre los escombros. «Las necesidades son enormes, pero aún podemos llegar a los más vulnerables».
Una trabajadora sanitaria relata a AsiaNews su huida de su pueblo en Mandalay debido a los bombardeos de la junta golpista que continuaron incluso después de los temblores del terremoto. Anoche mismo, los militares anunciaron un alto el fuego de 20 días en las zonas más afectadas para facilitar la ayuda. Pero muchos birmanos no se fían de estas palabras.
Mons. Marco Tin Win difundió un mensaje en el que comunica que la casa diocesana de Mandalay quedó destruida por el terremoto y los sacerdotes duermen al aire libre junto con la población. A pesar de los llamamientos al cese de las hostilidades, la junta golpista sigue atacando a las milicias de la resistencia, pero ha admitido que también atacó a un equipo de rescate chino.
No solo las ciudades, sino también las zonas rurales más abandonadas están sufriendo. Habría casi 100 muertos y 3.000 casas destruidas en la región que, antes del estallido de la guerra en 2021, era un conocido destino turístico. La población local todavía se estaba recuperando de las consecuencias del tifón Yagi de septiembre. Mientras las principales milicias étnicas se adhieren a la propuesta de alto el fuego, muchos temen que la junta militar impida que lleguen las ayudas.
Los desplazamientos siguen siendo limitados, y todavía hay mucho miedo en Myanmar después del terremoto del 28 de marzo que devastó las regiones centrales del país. Además de las réplicas, también continuaron los bombardeos del ejército. "Es como disparar a un herido", comenta a AsiaNews la hermana Valentina Pozzi, superiora del instituto fundado por el P. Carlo Salerio que hoy cuenta con 458 religiosas birmanas. "Es un milagro que, hasta ahora, no haya habido víctimas entre nosotros".
Un equipo de emergencia de Taipei esperó en vano durante dos días sin poder entrar en el país puesto de rodillas por el terremoto. El perverso entrelazamiento de cuestiones políticas y el rescate de personas bajo los escombros. Prohibida la entrada incluso a los periodistas extranjeros. Es indispensable un alto el fuego para que la ayuda no se convierta también en un arma de guerra.
Hizo un llamamiento en nombre de la Conferencia Episcopal mientras cientos de personas siguen bajo los escombros. Ayer siguieron los bombardeos en el país a pesar de la tragedia. La cercanía de la arquidiócesis de Tokio, hermanada con Myanmar desde hace muchos años. La resiliencia de la iglesia de San Miguel, en Mandalay, que por tercera vez deberá renacer de las ruinas.
Podrían ser muchísimos los muertos tras el sismo de magnitud 7.7 que ha sacudido el país, ya devastado por cuatro años de guerra civil. Fuentes locales informan el derrumbe de templos, mezquitas e iglesias, así como el colapso de puentes y edificios, algunos de los cuales alojaban a desplazados que huían de los bombardeos de la junta militar. Se encuentran cortadas las conexiones entre las principales ciudades. La oración de un sacerdote desde Myanmar: "¿Hasta cuándo, Señor?".
En la fiesta de San José tuvo lugar la ordenación episcopal de Mons. Raymond Wai Lin Htun presidida por el Card. Charles Maung Bo. Advertencia del arzobispo de Yangon contra las divisiones étnicas: «¿Podemos ceder a la tentación de tratar a los demás en función de identidades creadas por el hombre, cuando en realidad todos somos Hijos de Dios creados a su imagen?».
Noticias de hoy: La policía turca detiene a 282 presuntos miembros del Pkk, continúa la destitución de alcaldes prokurdos en el sureste. Sagaing, milicianos de un grupo rebelde antimilitar los asesinos del P. Una universidad india expulsa a cientos de estudiantes nepalíes que protestaban por el suicidio de un compatriota víctima de acoso en el campus. El instituto demoscópico más influyente de Hong Kong suspende sus encuestas ante la represión de las autoridades.
La analista experta en el Sudeste Asiático Bridget Welsh analiza los primeros pasos de Kuala Lumpur al frente del bloque: el liderazgo tendrá éxito si antepone «los intereses de quienes viven en la región a los de sus dirigentes». «Invocar 'elecciones inclusivas' en Myanmar contradice la situación real sobre el terreno».
Pneg Deren había viajado a Yunnan para encontrarse con funcionarios chinos, según informaron los medios locales, pero después quedó retenido. Pese a las presiones de Beijing, su milicia, el MNDAA, mantiene el control de la ciudad de Lashio, en el Estado de Shan. Mientras tanto, los bombardeos de la fuerza aérea birmana en la región han dejado al menos 12 personas muertas, entre ellas ocho niños. También destruyeron una iglesia bautista.
Mons. Celso Ba Shwe -obispo de Loikaw- participó en la celebración que cada año, el tercer domingo de noviembre, recuerda el vínculo de solidaridad entre los católicos japoneses y la Iglesia de la antigua Birmania, ahora herida por la guerra. Apoyo a las escuelas de la selva a través de la iniciativa Semillas de Esperanza. Arzobispo Kikuchi: «La esperanza brota de los corazones de quienes caminan juntos».
Obligado a abandonar la catedral en noviembre de 2023 debido a los enfrentamientos armados, el obispo de Loikaw sigue asistiendo a los fieles de la diócesis, ahora dispersos en 200 campos de refugiados en zonas remotas. Cuenta a AsiaNews el drama de los jóvenes que se unen a las milicias y reflexiona sobre estas comunidades del Estado de Kayah, que a pesar de sus enormes dificultades hoy le recuerdan a los primeros cristianos. "La Iglesia es el lugar donde las personas comparten y se aman".
Las crecientes conquistas de la Alianza de la Hermandad, compuesta por tres poderosas milicias étnicas, están poniendo de manifiesto las dificultades de administrar territorios diferentes. Un reto que puede explicar las dificultades para hacerse con el control incluso de las mayores ciudades de Myanmar. La implicación de China también se perfila cada vez con mayor claridad.
Siete años después de la gran huida de cientos de miles de miembros de la minoría musulmana de Myanmar, la situación en los centros de acogida de Bangladés sigue siendo de emergencia. El relato de un jesuita, implicado desde hace años en labores de ayuda y acogida. Daca dispone de recursos limitados, pero se necesita estabilidad y paz en la antigua Birmania antes de repatriarlos.
Detenciones arbitrarias, registros humillantes, atención pre o posnatal denegada: en un informe de la International Commission of Jurists, una ONG con sede en Ginebra, los testimonios y las denuncias sobre un aspecto "puntual" de la represión de los generales en los tres años que han transcurrido desde el golpe. Todavía hay más de 1.500 mujeres en las cárceles por motivos políticos en Myanmar.
En las últimas semanas se reanudaron los enfrentamientos en el Estado de Shan y en Rakhine. El número dos de la junta militar, Soe Win, y el ex presidente Thein Sein viajaron a Beijing y Qingdao para hablar sobre la estabilidad en la frontera, el comercio y las inversiones. Pero según algunas fuentes, también se han firmado nuevos contratos para la compra de material bélico.
Kim Aris, de 47 años, recibió en lugar de su madre la ciudadanía honoraria italiana que el municipio de Abbiategrasso decidió conceder a la líder birmana. Desde hace más de tres años en prisión, ni siquiera su familia sabe dónde se encuentra recluida ni cuáles son sus condiciones de salud, a pesar de que en estos días cumple 79 años. Su hijo explicó que la comunidad internacional no entendió las medidas que tomó Aung San Suu Kyi con los rohingya.
A pesar del bloqueo de Internet impuesto por la junta golpista, Naciones Unidas habla de «informes aterradores y preocupantes» de ataques contra la población civil de etnia rohingya. En los últimos meses, la junta golpista, cada vez con más dificultades sobre el terreno, ha avivado las tensiones interétnicas, alistando (incluso por la fuerza) a los rohingya contra la milicia étnica local. Una tragedia que está devolviendo al país a los tiempos de la violencia sectaria.