03/04/2017, 11.41
RUSIA
Enviar a un amigo

Murió Evtushenko, el alma del deshielo

de Stefano Caprio

Es el poeta que cantó el sueño del hombre simple frente a los males de la burocracia y de la política. El apremiante deseo de “otra cosa” frente a la aparente perfección de la vida soviética. Las denuncias de antisemitismo. En defensa de los jóvenes, y contra la retórica nacionalista. 

Roma (AsiaNews) – El primero de abril, precisamente en aquellos días en los que se derriten las nieves invernales, desapareció de este mundo uno de los más grandes “profetas del deshielo”, el poeta y escritor Evgeni Evtushenko. Su muerte ocurre en un período en el cual Rusia trata de reencontrar un camino para el enésimo “deshielo”, luego de un largo estancamiento político y cultural. La fama de este gran poeta se remonta a los comienzos de los años Sesenta, cuando, en medio de la incertidumbre post-estalinista de la Unión Soviética, bajo el gobierno de Jruschov, comenzaron a organizarse veladas de poesía y literatura en el Museo del Politécnico de Moscú, de las cuales Evtushenko fue uno de los principales animadores.

Él ya se había convertido, desde 1952 y con sólo 20 años de edad, en el miembro más joven de la Unión de Escritores de la URSS, luego de publicar su segunda antología, Exploradores del porvenir. En ésta, abordaba el futurismo revolucionario de la época de Majakovskij, denunciando los males de la burocracia e imaginando que mientras los altos mandos se preocupan por su futuro, el hombre sencillo, como sea, logra soñar por su cuenta. En su lírica, más allá de las denuncias sociales, continuamente se encuentra el deseo apremiante de “otra cosa” distinta de la aparente perfección de la vida soviética, como en la poesía Después de cada lección, la cual también ha sido citada por Luigi Giussani en su libro El Sentido Religioso: “Cosas buenas en la vida/hay tantas: los compromisos/las flores, el teatro… sólo falta/ aquello que tú quisieras –falta/ lo esencial”.

En 1991, al colapsar el comunismo, el poeta emigró a los Estados Unidos, y se dedicó a la enseñanza en la Universidad de Oklahoma, viajando a Rusia cada tanto. Su fama, casi legendaria luego de aquellos años que marcaron el inicio del disenso soviético, suscitaba las reacciones más contradictorias. Siempre original e imprevisible, incluso en los comentarios referidos a la evolución de la política en su patria, de intelectual de protestas devino un hombre público de gran influencia y poder, hasta llegar a ser un punto de referencia en los años de la Perestroika de Gorbachov. En 1961 escribió el famosísimo poema Babij Jar, una denuncia del antisemitismo soviético, en la cual se evocaba la masacre de la población judía, perpetrada por los nazis en las inmediaciones de Kiev, que fue una de las matanzas más tremendas de la historia del Holocausto, en la cual hallaron la muerte 33.771 personas. Los soviéticos escondieron el recuerdo de aquella tragedia, revelando sentimientos que no diferían mucho de los de los nazis. La denuncia de Evtushenko quedó como una advertencia para muchas generaciones de rusos y traspasó las fronteras nacionales, llegando a tener un efecto similar al Diario de Anna Frank. Su amigo y gran compositor Dimitri Shostakóvich  transformó el poema de Evtushenko en la famosa Sinfonía Nro. 13.

Muchos comentaristas han observado que en el último tiempo en Rusia se nota la carencia de una conciencia del pasado, sofocada por retóricas nacionalistas que resultan cada vez menos atractivas, sobre todo para los jóvenes. La historia de la antigua grandeza de Rusia no logra dar calor a los corazones, la memoria de los tiempos soviéticos ya se está desvaneciendo incluso en los adultos, y los más jóvenes ni siquiera conservan la de los conmocionados años Noventa, que hasta ahora han sido usados por Putin y sus socios como espantapájaros para una población en busca de estabilidad y bienestar.  Quizás valga la pena volver a los versos estudiantiles de Evtushenko, tan amados por Don Giussani, a la simple y humanísima búsqueda de un sentido más verdadero que otorgar a la existencia: “Tú eres mi jovencísima compañera de viaje/Yo, tu compañero anciano. / Me asalta el pensamiento/ de qué habrá de ocurrir/ con tus castaños cabellos/ Y si yo te atormento con la inquieta/ búsqueda de algo elevado, sublime, / que primero he creído en muchas cosas/ es para que ahora puedas creer tú…”. 

TAGs
Enviar a un amigo
Vista para imprimir
CLOSE X
Ver también
Aleksandr Gabyshev, el chamán anti-Putin, fue internado en un hospital psiquiátrico
23/09/2019 10:21
Fondos del exterior para ONG indias: todavía quedan miles sin licencia
21/01/2022 12:05
Moscú, cientos de detenidos por apoyar a un activista de derechos humanos tayiko
07/04/2021 10:35
Putin se sumerge en el agua helada con ocasión de la fiesta del Bautismo
20/01/2021 10:12
Moscú, el Patriarca Kirill cumple 75 años y ensalza la ‘libertad’ rusa
23/11/2021 10:31


Newsletter

Suscríbase a la newsletter de Asia News o cambie sus preferencias

Regístrese
“L’Asia: ecco il nostro comune compito per il terzo millennio!” - Giovanni Paolo II, da “Alzatevi, andiamo”