Imee Marcos contra su hermano Ferdinand: es mejor Sara Duterte como presidenta

La senadora abre un nuevo capítulo en la saga familiar, que amenaza con arrastrar a todo el país. Tras las acusaciones de drogas, habla de un vacío de liderazgo en el país y pide que la vicepresidenta asuma el poder. Detrás del enfrentamiento hay divergencias políticas y el escándalo de corrupción. Pero analistas y expertos consideran “cuestionable” la capacidad de liderazgo de la hija del expresidente.

Manila (AsiaNews) - La senadora Imee Marcos, hermana del presidente Ferdinand Marcos Jr., con quien las relaciones son turbulentas desde hace tiempo, ha hablado de un vacío de liderazgo en la nación, en una clara referencia a su hermano y su gobierno, y ha añadido que apoya a la vicepresidenta Sara Duterte. Se abre así un nuevo frente de conflicto en las altas esferas institucionales del país filipino, mientras varios políticos están involucrados en un escándalo multimillonario de enormes proporciones y en constante crecimiento, que amenaza con socavar aún más la credibilidad del país. “Hay un vacío en la cúpula”, declara en una entrevista publicada hoy, y añade que esto constituye “un problema”, porque “todo tipo de fuerzas siniestras y malignas se han apresurado a llenar ese vacío”. Por eso apoya a la vicepresidenta como posible “reemplazo”.

La tensión entre los dos hermanos se intensificó este mes cuando Imee, de 70 años, participó en una manifestación contra la corrupción y afirmó que su hermano era adicto a la cocaína, acusaciones que la oficina del presidente desmintió rotundamente. En respuesta, esta semana el propio presidente Marcos atacó a su hermana y (ex) aliada, expresando su preocupación por ella y afirmó que “la señora que ven hablando en televisión no es mi hermana”.

Cuando le preguntaron cómo estaba enterada del supuesto problema de drogas de su hermano, Imee respondió que todavía recibe informes de amigos del presidente, médicos, personal de seguridad presidencial y personal doméstico que hace muchos años están con él. “Por alguna razón, supongo que porque soy la mayor, continúan informándome”, agregó, alimentando una disputa familiar y política que amenaza con proyectar una sombra siniestra sobre la nación.

Un representante de la oficina del presidente desestimó las declaraciones de la senadora, afirmando que el presidente ya había “afrontado la cuestión relativa a las drogas con un certificado médico que mostraba un resultado negativo en las pruebas”. Por otra parte, la disputa pública ha estallado en un momento crítico para el país del Sudeste Asiático, envuelto en un escándalo de corrupción multimillonario que involucra fondos destinados a infraestructuras para inundaciones.

En esta situación Imee Marcos se alinea con la vicepresidenta Sara Duterte, ex aliada del presidente que se ha convertido en su mayor rival cuando rompieron su estrecha relación debido a divergencias políticas. En este momento la administración Marcos está enfrentando uno de sus mayores desafíos, dado que el escándalo de corrupción también involucra a miembros del gobierno, incluyendo el propio presidente, y ya hubo varios pedidos de que el presidente de 68 presente la renuncia.

Además, la mayoría de los manifestantes anticorrupción han pedido el procesamiento penal de aquellos que están involucrados en el escándalo, incluyendo legisladores, funcionarios y contratistas. La senadora afirmó que, si la situación empeora, la sucesión constitucional sería la opción ideal. “Si es la vicepresidenta, estoy segura de que ella llenará el vacío y ocupará su lugar”.

Sus declaraciones en apoyo a Sara Duterte llegan en vísperas del fallo de apelación de la Corte Penal Internacional sobre el recurso presentado por Rodrigo Duterte, padre de Sara y exlíder de Filipinas, para obtener la libertad bajo fianza. El tribunal de La Haya podría conceder la libertad condicional, lo que significa que Duterte sería liberado de la cárcel a la espera de nuevos procedimientos, o podría rechazar la apelación, manteniéndolo en régimen de prisión preventiva a la espera del juicio. Durante las elecciones de medio término de mayo, Imee abandonó la lista de su hermano para unirse a Sara Duterte en la campaña electoral, asegurándole la reelección.

Sara Duterte, que también ha sido objeto de acusaciones de malversación de fondos públicos que ella niega, es considerada una fuerte candidata para las elecciones presidenciales de 2028. Marcos no puede postularse más allá de su único mandato de seis años. El profesor asociado Gary Ador Dionisio, decano de la Escuela de Diplomacia y Gobernanza de De La Salle-College of Saint Benilde, afirmó que las últimas declaraciones de Imee no ayudarán al país a salir de la crisis de corrupción. “Lo que necesitamos es más claridad, más pruebas que polémica”, afirmó. Como potencial presidenta, Dionisio considera que Sara Duterte “tiene un historial de liderazgo y un desempeño de gobierno cuestionables y problemáticos. Reemplazar a uno por otro —concluye— es como elegir entre el diablo y el mar profundo”.