La lucha contra el tráfico de drogas en Kirguistán

de Vladimir Rozanskij

Detenidos los máximos dirigentes de la principal organización criminal transnacional, responsable del transporte de drogas al extranjero, mientras crece el consumo local. El narcotráfico sigue recorriendo la llamada "ruta del norte" a través de Tayikistán, Kirguistán, Kazajistán y Rusia para llegar finalmente a Europa, con la connivencia generalizada de las fuerzas del orden.

Biskek (AsiaNews) - Los servicios especiales de la Gknb de Kirguistán han declarado una "lucha sin cuartel" contra el narcotráfico en el país, en particular contra el tráfico de drogas sintéticas. Al mismo tiempo, se ha hecho pública la noticia de que se ha descubierto la participación de 10 policías, entre ellos tres oficiales, en la difusión de estupefacientes durante el último año y medio.

En los últimos días se asestó un golpe decisivo a la principal organización delictiva transnacional, que se dedicaba al transporte de drogas al extranjero a través del territorio de Kirguistán, con la detención de dos de los principales miembros del grupo. La operación se llevó a cabo junto con la agencia de aduanas de Manas (nombre del héroe épico del pueblo kirguís), y se confiscaron grandes cantidades de estupefacientes. En uno de los almacenes de Biskek se encontraron cuatro toneladas de opio, que, según los análisis de laboratorio, contenían elementos estupefacientes y psicotrópicos, como codeína y morfina, en una cantidad aproximada de 350 kilogramos.

El presidente del Gknb, Kamčibek Tašiev, insistió en sus intenciones de "llegar hasta el final sin vacilar", visitando la ciudad de Šamaldy-Saj, en la región de Džalal-Abad, ya que "el consumo, la venta y la difusión de estupefacientes se han convertido en un problema social de masas". Antes se cultivaban hierbas narcóticas, mientras que hoy se producen drogas sintéticas y se multiplican los laboratorios para su fabricación. Mientras que antes las drogas pasaban de mano en mano, hoy se distribuyen a través de Internet y otras tecnologías; los traficantes no dan la cara, sino que se limitan a ofrecer el enlace y a cobrar el dinero en billeteras virtuales.

De este modo, lamenta Tašiev, "tantos jóvenes inteligentes y con talento se convierten en drogadictos, y no harán ningún bien al Estado en su futuro, al contrario, le harán mucho daño". El objetivo es "mantener sana a nuestra juventud, para que nuestra sociedad no se arruine en los próximos 10 años". La policía vigila especialmente los lugares de vacaciones y las discotecas, pero también los colegios, institutos, administraciones, restaurantes y bares de todas las ciudades. Los "barones de la droga" tienen tradicionalmente muchas conexiones en organismos públicos, y "hay que romper el techo".

La guerra contra los traficantes ha recibido una importante aceleración tras la muerte del líder criminal Kamči Kolbaev durante un tiroteo el pasado octubre, pero el jefe del Consejo de Seguridad, Marat Imankulov, advirtió que "es demasiado pronto para cantar victoria en esta batalla". Recuerda que la llegada de los talibanes supuso la ventaja del cese de la producción de opio en Afganistán, pero esto no significa que el tráfico de drogas se haya detenido: "las reservas que les quedan a los traficantes siguen siendo suficientes para muchos años, para producir miles de toneladas de estupefacientes".

La droga sigue recorriendo la llamada "ruta del norte" a través de Tayikistán, Kirguistán, Kazajistán y Rusia para llegar finalmente a Europa. La connivencia entre las fuerzas del orden sigue siendo generalizada, y recientemente en la ciudad de Oš se detuvo a varios policías de alto rango que controlaban el transporte desde Afganistán, y sin los cuales sería imposible asegurar el tráfico de drogas a niveles tan amplios. Se perfeccionaron los mecanismos de control interno, como confirmó el jefe de la sección analítica del Ministerio del Interior, Marsel Dootaliev.

El ex diputado y ex policía Turatbek Malylbekov opina que la cuestión de la limpieza de los órganos del Estado al mezclarse con los narcotraficantes está "aún muy lejos de resolverse". De hecho, sólo hay dos pasos posibles desde las fronteras afganas, además de una serie de rutas secretas bastante precarias, y mucho depende de quién controle estos caminos: "si no se deshacen de los policías corruptos de las fronteras, el problema recae sobre todo el cuerpo de policía". Por otro lado, las drogas sintéticas, cuya expansión comenzó en 2017, proceden principalmente de Rusia, Kazajistán y China, y se ha creado una división especial para contrarrestar este sector, con especialistas en tecnologías digitales. Las acciones de control policial se están endureciendo y están provocando varias protestas entre los ciudadanos, pero ya se han dejado de lado todas las precauciones.