Paul Bhatti: Sin solución política, inevitable intervención de los militares en Paquistán

El líder católico habla de "riesgo concreto" de un golpe de Estado del ejército. Ningún acuerdo al finalizar el encuentro entre el primer ministro y el jefe de los militares; intercambio de acusaciones y denuncias, entre el gobierno y los opositores sobre las violencias de los días pasados. La Iglesia paquistaní pide oraciones por la paz y por el futuro del país.

Islamabad (AsiaNews)- "Si el gobierno no logra controlar la situación, entonces una intervención de los militares sería inevitable. Y por el momento el riesgo de que esto suceda es concreto". Es cuánto refiere a AsiaNews Paul Bhatti, ex ministro federal para la Armonía nacional y líder del All Pakistan Minorities Alliance (Apma), en relación con la crisis que está acechando al país asiático. El actual gobierno, en cargo del mayo de 2013 y guiado por el primer ministro Nawaz Sharif de la Pakistan Muslim League- Nawaz (Pml-N), terminó en la mira de una parte de la oposición, que pide las dimisiones del Primer ministro y la caída del ejecutivo. Según los críticos, éste subió al poder en mayo de 2013 a continuación de las elecciones que los dos líderes de la protesta- el ex campeón de cricket y jefe del Pakistan Tehreek-e-Insaf Imram Khan y el líder religioso populista Tahir ul-Qadri- consideran trucadas y caracterizadas por los fraudes. "Es una situación extremamente compleja- advierte Bhatti- y si no sub-entran otros factores, para evitar el caos y víctimas inocentes será necesario el ejército".

Desde el 15 de agosto, la crisis política paraliza la nación, con protestas callejeras por todos lados que han asumido en los días pasados unas características violentas. Ayer, centenares de manifestantes han irrumpido en el cuartel general de la Tv del Estado paquistaní, obligando a los responsables de la emisora a interrumpir la programación por algunos minutos. Los opositores se enfrentaron con las tropas del ejército, que intervinieron para retomar el control de la televisión.

Mientras tanto se concluyó con un nada de hecho el encuentro entre Sharif y el jefe del ejército, el general Raheel Sharif; el primer ministro rechazó la propuesta de dimisiones y, en acuerdo con los vértices del propio partido, denunció a la Magistratura a Imram Khan y Qadri en base a la ley anti-terrorismo. Los líderes de la protesta serían culpables de incitación a la violencia, tentado homicidio, robo e interferencia en los asuntos internos. Como respuesta, los líderes anti-gobierno han denunciado al primer ministro y a algunos miembros del gobierno por homicidio y tentado homicidio.

Interpelado por AsiaNews Paul Bhatti confirma que, según algunos datos, se encontraron "fraudes en las elecciones", pero no es aún posible cuantificar la portada. Dos o tres sedes con 5 mil electores resultan tener "20 mil votos", por lo tanto es "un dato de hecho" que hay irregularidades. La oposición ya había pedido una verificación el día después de las elecciones, pero "en nombre de la estabilidad se prefirió callar". El político católico explica que "los seguidores de Khan en el norte están muy determinados", listos "para morir por la causa"; para evitar el caos, "no queda que la intervención de los militares". Bhatti no excluye posibles dimisiones temporáneas del Primer Ministro "para evitar el exacerbarse de los ánimos", como queda siempre plausible en el horizonte un golpe de mano de parte de los militares. "El objetivo primario de todos-advierte- es la estabilidad, junto a la seguridad; y para que esto suceda, el país está dispuesto a confiar el poder en manos del ejército"

Preocupación por la actual crisis política emerge también de los vértices de las diócesis de Islamabad, que "rezan por una solución pacífica" de la crisis. El p. IIyas Jhon, de la diócesis de Rawalpindi, recuerda la jornada de oración del 31 de agosto pasado e invita a la nación a "permanecer unida" y rezar- el gobierno y las fuerzas armadas-para que "la situación se resuelva en el plano político". Maulana Tariq Alvi, del Concejo para la ideología islámica, condena la derivación "violenta de las protestas, porque "esa no resuelve nada". El p. Amir Mall, sacerdote de la arquidiócesis de Lahore, subraya que "en estos momentos difíciles pedimos a todo el país permanecer juntos, unidos y rezar por la patria. No podemos quedarnos como espectadores inertes y verla quemarse... Pedimos oraciones, porque la oración es un arma potente en estos momentos de dificultad".

(Ha colaborado Jibran Khan).