El Papa Francisco en el Ángelus como regalo dio a los presentes un pequeño crucifijo plateado distribuido por los pobres, refugiados y voluntarios. Pero ustedes, ¿qué dicen quien yo sea? Jesús hoy, dirige esta pregunta… a cada uno de nosotros”. La misión de Jesús “se cumple no en el amplio camino del suceso, sino en el arduo sendero del Siervo sufriente”. “La felicidad la encontramos solamente cuando el amor, el verdadero, nos encuentra, nos sorprende, nos cambia”. El aplauso para el p. Pino Puglisi y para los sicilianos.
| 16/09/2018
| VATICANO