26/11/2025, 14.48
INDIA
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Delhi: Confirmaron la destitución del oficial cristiano. Mons. Fernandes: 'Las leyes anti conversión traicionan la Constitución'

La Corte Suprema de la India ha confirmado la destitución del oficial cristiano Samuel Kamalesan, acusado en mayo de “grave indisciplina” por haberse negado a participar en un ritual hindú en su regimiento. En el Día de la Constitución, Mons. Savio Fernandes, obispo auxiliar de la arquidiócesis de Bombay, denuncia las leyes anti conversión como instrumentos de persecución contra las minorías: “Tergiversan la justicia y criminalizan la compasión. La India corre el riesgo de traicionar su concepción pluralista”.

 

Nueva Delhi (AsiaNews) - La Corte Suprema de la India confirmó ayer la destitución de un oficial cristiano del Ejército, Samuel Kamalesan, que se había negado a entrar en el garbhagriha del templo de su regimiento para participar en un puja, un rito religioso. Según los jueces, el hombre incurrió en "la forma más grave de indisciplina" y afectó la cohesión de la unidad de combate.

Durante la audiencia el presidente de la Corte, Surya Kant, afirmó que Kamalesan "utilizó una interpretación personal de su religión para violar la disciplina militar".

El abogado de Kamalesan, Gopal Sankaranarayanan, sostuvo que el derecho a la libertad de religión que garantiza el artículo 25 de la Constitución no se puede suspender solo porque una persona presta servicio en las Fuerzas Armadas. Pero los jueces replicaron que el artículo 25 "protege solo los aspectos esenciales de la fe, no cualquier sentimiento individual".

El Ejército, representado por la fiscal general adjunta Aishwarya Bhati, explicó que el oficial había desertado reiteradamente de desfiles y actividades religiosas obligatorias, a pesar de los intentos de sus superiores de convencerlo.

En mayo, el Tribunal Superior de Delhi ya había confirmado la medida disciplinaria del Ejército, afirmando que el oficial "había antepuesto su religión a una orden legítima de su superior", violando así los "elementos esenciales de la ética militar". Kamalesan había reiterado que el vínculo entre los soldados se basa en "el respeto mutuo, el patriotismo y la vida compartida", y no en las prácticas religiosas.

Desde hace tiempo la extrema derecha hindú discrimina a las minorías, a menudo recurriendo a medios como las leyes anti conversión. Con motivo del Día de la Constitución de la India, que se celebra hoy, 26 de noviembre, Mons. Savio Fernandes, obispo auxiliar de la arquidiócesis de Bombay, emitió una declaración en la que describe esas normativas como una amenaza a la libertad religiosa.

“Nuestra Constitución, nacida en el crisol de la lucha por la libertad, no es solo un documento jurídico sino un pacto moral”, comenta el prelado en un comunicado. “Sin embargo hoy este pacto se encuentra bajo presión. Las leyes que pretenden proteger la religión se han convertido en espadas contra la conciencia. Las llamadas Leyes de Libertad de Religión (Freedom of Religion Acts), aprobadas en varios Estados indios y que ahora también se ciernen sobre Maharashtra, no son escudos de la libertad. Son leyes anti conversión que tergiversan la justicia, presuponen la culpabilidad y criminalizan la compasión”.

El obispo se refiere a las diversas normativas (ya aprobadas en varios Estados de la India, y que se están discutiendo en Maharashtra) que criminalizan las conversiones forzadas. En realidad estas se utilizan desde hace tiempo para atacar a creyentes de religiones distintas del hinduismo, incluyendo la comunidad cristiana. “Los eventos del 25 de julio de 2025 en Durg, en Chhattisgarh, entre muchos otros, son un ejemplo significativo: dos religiosas de Kerala, junto con el joven tribal Sukaman Mandavi, acompañaban a tres mujeres tribales adultas, cristianas desde hace muchos años, a Agra para realizar un trabajo doméstico voluntario. El consentimiento de los padres estaba documentado. Sin embargo, una turba liderada por Jyoti Sharma, miembro de la Durga Vahini, las agredió y coaccionó. Las presionaron para que hicieran declaraciones falsas. Las religiosas fueron encarceladas. La policía se mantuvo al margen mientras se filmaba el abuso. Durante ocho días desgarradores, la inocencia permaneció entre rejas. El 2 de agosto, un tribunal NIA de Bilaspur les concedió la libertad bajo fianza dejando constancia de la absoluta inconsistencia del FIR [Primer Informe]. ¿Los agresores? Quedaron libres. La ley no establece ningún castigo para los que hacen acusaciones falsas. No es una excepción. Es el resultado predecible de leyes que autorizan denuncias de terceros, justicia vigilante y complicidad del Estado en la formación de prejuicios”, continúa Mons. Fernandes, citando un episodio reciente.

Las preocupaciones se concentran ahora en Maharashtra, donde “un nuevo Proyecto de Ley de Libertad de Religión’ (Freedom of Religion Bill) amenaza con proyectar una sombra aún más oscura. Durante décadas las instituciones católicas han alimentado a los hambrientos, acogido a las personas sin hogar, educado a los últimos y curado a los enfermos, sin distinción de credo. No son transacciones: son traducciones del amor en acción. Pero, bajo la nueva ley propuesta, cada hogaza de pan podría ser interpretada como un cebo, cada aula como una conspiración”.

“La Iglesia católica en la India no es ajena a los desafíos - sigue diciendo el prelado en su declaración -. Desde que santo Tomás desembarcó en estas costas en el 52 d.C. hasta la Madre Teresa que abrazaba a los moribundos en los callejones de Calcuta, desde el martirio del Padre Stan Swamy por los derechos tribales hasta los sacrificios silenciosos de innumerables laicos, religiosas y sacerdotes, la nuestra es una historia de servicio, no de subversión”.

La Iglesia india está cerca de “los dalits, adivasis y refugiados. No para convertirlos, sino para afirmar su humanidad. ¡Esto no es proselitismo! Es presencia profética”. Y la atención a los menos favorecidos - afirma el obispo - no está en conflicto con la Constitución. Al contrario: “La Constitución de la India no es solo una ley. Es una visión moral de unidad y dignidad, que refleja el llamado evangélico a la justicia y la paz. El art. 51A nos invita a promover la armonía, proteger la diversidad y custodiar nuestra cultura compuesta. Jesús nos llama a ser ‘sal de la tierra’ y ‘luz del mundo’. No son mandatos en conflicto: son misiones convergentes”.

Del mismo modo, “defender los derechos de las minorías no es sectarismo; es patriotismo democrático. Defender la libertad constitucional no es desobediencia; es discipulado. El alma de la India se encuentra en una encrucijada. ¿Dejaremos que la sospecha sofoque la compasión? ¿Permitiremos que leyes nacidas para la libertad se conviertan en cadenas de opresión?”

La Iglesia propone una reforma o una abrogación de las leyes anti conversión, mayor protección contra las acusaciones falsas, que la carga de demostrar la propia inocencia recaiga en el denunciante y no en el acusado, y mayor protección para las obras de caridad como expresiones de fe. “Como enseña el Concilio Vaticano II, debemos leer los signos de los tiempos a la luz del Evangelio. Hoy la señal es clara: el pluralismo de la India es su fuerza, no su amenaza - concluye Mons. Fernandes -. Que sea la conciencia, no la coacción, la que moldee nuestras almas. Que la India siga siendo la tierra donde cada corazón es libre de buscar a Dios a su manera”.

(con la colaboración de Nirmala Carvalho)

 

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