05/04/2016, 11.23
TIBET
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El Oráculo del Tibet lanza granos de cebada contra los políticos: corruptos e incorrectos

El primer ministro del gobierno en el exilio, el presidente y los miembros del parlamento fueron a ver a Nechung Choegyal y a la “divinidad encarnada”, Tsering Chenga, para recibir las profecías relativas al próximo gobierno. Ambos, máximos exponentes del misticismo vinculado al budismo tibetano y a la religión Bon, se expresaron con dureza: “Habéis desaprovechado el don de la democracia y ponen en riesgo la vida del Dalai Lama”. En el curso de la adivinación, los granos de cebada usados para el ritual fueron usados contra los políticos.

Dharamsala (AsiaNews)- El Oráculo del Tibet y la “divinidad encarnada” que lo acompaña expresó “desprecio y repugnancia” hacia los políticos del gobierno tibetano en exilio, acusándolos de “desaprovechar el don de la democracia” y de “poner en riesgo la vida del Dalai Lama”. Los juicios surgieron durante el ritual-encuentro con los máximos vértices del ejecutivo tibetano, que se dirigieron al monasterio Nechung para recibir la profecía relacionada con el próximo gobierno. Las elecciones se desarrollaron el 21 de marzo, en un clima de insatisfacción general por el comportamiento incorrecto de los candidatos.

Miles de tibetanos fueron a las urnas para elegir al 15° jefe del Kashag (Gobierno en el exilio) y los cuarenta y cinco miembros del 16° Parlamento tibetano. Las votaciones han involucrado a ochenta y ocho mil tibetanos de la diáspora, registrados en la oficina electoral de Dharamsala, que han expresado sus preferencias en trece países diversos. En un primer momento, se trató de involucrar también a los tibetanos que se quedaron en la patria o al menos a aquellos de las provincias chinas fronterizas como Gansu, pero el proyecto fue abandonado por la oposición de Beijing.

Se esperan los resultados en los próximos días, pero en la carrera para el rol de primer ministro quedaron sólo el actual Premier Lobsang Sangay y el presidente del Parlamento, Penpa Tsering. Ambos, junto a los miembros de la Cámara, estaban presentes ante el Oráculo Nechung Choegyal y la “divinidad encarnada” Tsering Chenga. Este último, como parte del ritual, habló en un dialecto arcaico que luego fue traducido por los religiosos del monasterio: sin embargo, un video grabado durante la profecía muestra a la “divinidad encarnada” lanzar granos de cebada contra la cara de los presentes como signo de “desprecio y repugnancia” por su “corrupción y su mala conducta”.

En la profecía oficial, el Oráculo “condena la mala gestión del don de la democracia”. Os advierto: este modo de obrar podría provocar consecuencias negativas sobre la salud y sobre la vida del Dalai Lama. Os invito a ofrecer inmediatamente vuestras disculpas de corazón a Su Santidad”. La referencia está dirigida a la campaña electoral y a diversas violaciones de la ley que la regla, denunciadas también por diversos grupos tibetanos e internacionales.

Un tibetano de Dharamsala, que prefiere no ser nombrado, dice al Phayul: “No fue una profecía, sino más bien una dura reprensión. Por otro lado, el mismo Dalai Lama no está contento de cómo anduvieron las cosas. El Oráculo pidió a los culpables que se disculparan, y a mí me parece extraño que sus conciencias no les hayan impulsado a arrodillarse ante de nuestro líder”.

 

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