Moscú y el frente interno de la cultura

de Vladimir Rozanskij

Tras la invasión de Ucrania, los dirigentes políticos y los medios de información procuran formas de dar un mayor impulso a la cultura nacional. Los blogueros, bajo la mira: podrían exigirles una licencia estatal para operar. Se pregona una vuelta a los "cuentos de hadas soviéticos" en lugar de "Harry Potter".

Moscú (AsiaNews) – Los diputados de la Duma y los propietarios de los medios de comunicación rusos presentaron una propuesta para que los blogueros deban contar con una licencia del Estado. La iniciativa surgió durante una reunión ampliada de la Comisión Parlamentaria de Cultura, que debatió cómo desarrollar el arte en las condiciones impuestas por las sanciones y las operaciones militares. Vladimir Tolstoj, el asesor del Presidente Vladimir Putin, explicó: "tenemos que ser capaces de responder a los propósitos y valores de la Rusia actual y evitar abrir un nuevo frente en el campo de la cultura".

Según Tolstoj, hoy la posición del Estado es evidente, y no es necesario abrir otros frentes... está la línea del presidente, formamos parte del equipo del presidente y apoyamos su rumbo". El funcionario dejó en claro a los participantes en la reunión que "en el campo de la cultura, es muy fácil destruir las relaciones, y los hombres de la cultura deben expresar sus posiciones a través de espectáculos, películas, libros, y no a través de peticiones" . Se espera que "apoyen abiertamente la realidad actual", dijo, evocando expresiones típicas del "realismo soviético" del siglo pasado.

El diputado Aleksandr Šolokov también planteó la cuestión de la censura en el ámbito de la cultura, y la necesidad de aplicarla: "En situaciones en las que está en juego la seguridad del país, los problemas de la censura se resuelven rápidamente y con mucha facilidad. La creatividad debe ser libre, pero los resultados de esta creatividad "deben ser objeto de una evaluación adecuada". Otro diputado, el ex cantante Denis Majdanov, advirtió que mucha gente en Rusia había sido influenciada por Occidente hasta el punto de "jugar a la pseudodemocracia, desatando una crisis entre los que se dedican a la cultura". En su opinión, es esencial destacar una fuerte ideología de Estado, tomando como ejemplo lo que ocurre en China.

Los miembros del Comité proponen un código ético para los intelectuales y artistas, en el que se aclare a fondo "lo que es bueno y lo que es malo, y se ponga punto final a los jueguitos". Majdanov se queja de que "ahora es normal que, cuando un actor aparece en el escenario de cualquier club, empiece a decir palabrotas e insultos, quizá delante de un público infantil, y esto no debe volver a ocurrir". El ex diputado Dmitry Pevtsov también argumentó que los que aparecen en escena deben ser responsables de lo que dicen: "en Ucrania, 30 años de distorsión de valores y significados han dado los frutos que vemos hoy". Ahora los ucranianos se han vuelto hostiles hacia los rusos, por lo que "tenemos que trabajar más duro, más agresivamente en estos valores".

Según algunos de los presentes, hoy es necesario "organizar conciertos en el Donbass, para compensar las críticas de los hombres de la cultura contra la operación militar especial", a los que hay que considerar simplemente "traidores". Los que eligen para sí mismos "un itinerario de libre expresión" no pueden ser considerados "parte de la cultura nacional", señaló Elena Jampolskaya, jefa del Consejo de Cultura de la Duma. Esto también se aplica a los símbolos comerciales, como el cierre de McDonald's y la gente se queja "no de las hamburguesas, sino de la mentalidad que hay detrás, la de una fuerza que invita a imponer un sistema de vida".

Otra diputada, Elena Drapeko, advierte los riesgos de apresurar "un cisma entre rojos y blancos; conocemos a los artistas, son propensos a los arrebatos emocionales, dejemos que se calmen", para poder recuperarlos en la mayor medida de lo posible. "A la ideología fascista del odio hacia la humanidad hay que contraponer la ideología positiva del amor y la comprensión", añade Drapeko, y pide no apoyarse únicamente en los políticos y funcionarios, sino también en la colaboración de los intelectuales y filósofos que están del lado correcto.

Las conclusiones del Comité son muy radicales, como resumió el presidente de Gmp Radio, Jurij Kostin: "Este es nuestro país, la historia nos dirá si nos equivocamos o tenemos razón, pero nosotros vivimos aquí y debemos estar de su lado". Por ello, los blogueros deben contar con una autorización, al igual que los anunciantes, para ocupar el espacio de Internet, "donde parece que todo está permitido". Se financiarán nuevos proyectos de cine ruso para compensar la retirada de Disney, Sony, Paramount y Universal del mercado nacional; el concepto de cine ruso ya está listo "hasta el 2030", y también se apoyarán las actividades literarias, especialmente las dirigidas a los niños, volviendo a "los sanos escritores de cuentos soviéticos como Kornej Čukovskij, y deshaciéndose de J. K. Rowling y Holly Webb".