Cachemira. Estallaron explosivos incautados por la policía: nueve muertos y decenas de heridos
Destruyó el cuartel de Nowgam, en Srinagar. Las autoridades consideran que se trata de un accidente. Pero el episodio ha ocurrido en un clima ya tenso tras los atentados en el Red Fort de Delhi y en Islamabad, así como las recientes operaciones contra células militantes en Jammu y Cachemira.
El director general de la policía de la región federal de Jammu y Cachemira, en la frontera con Pakistán, calificó como “accidental” en una conferencia de prensa la violenta explosión que se produjo anoche en la estación de policía de Nowgam, en Srinagar, ciudad ubicada en la Cachemira administrada por la India. Nueve personas murieron y al menos 32 resultaron heridas por la detonación de una pila de explosivos confiscados mientras el personal encargado los estaba analizando. La tragedia ha ocurrido pocos días después del atentado cerca del histórico complejo del Red Fort de Delhi, donde estalló un automóvil que mató a 13 personas.
La explosión ocurrió en las últimas horas de ayer, viernes 14 de noviembre y entre las víctimas se encuentran policías, funcionarios del gobierno y personal forense. Se están llevando a cabo las investigaciones correspondientes para determinar la causa y la magnitud de los daños. El director general Nalin Prabhat señaló que “cualquier especulación sobre la causa de este incidente es superflua”. Una afirmación que intenta desviar las explicaciones de una matriz terrorista, la principal hipótesis de la explosión en Delhi. El último de una serie de propietarios del Hyundai i20 que detonó es originario precisamente de Pulwama, en Jammu y Cachemira, región conocida por la inestabilidad y el alto número de atentados, como el de abril pasado en Pahalgam, en el que murieron más de 20 turistas indios.
Según fuentes policiales consultadas por Reuters, en estas horas se está llevando a cabo la identificación de los cuerpos de las víctimas, ya que algunos quedaron completamente carbonizados. “La intensidad de la explosión fue tal que algunos restos humanos fueron recuperados en las casas vecinas, a unos 100-200 metros de la estación de policía”, informaron. La explosión envolvió el edificio en llamas, así como varios vehículos estacionados en los alrededores, y después se registraron explosiones menores. Los bomberos acudieron al lugar para sofocar el incendio y permitir el acceso.
La explosión en el Red Fort del martes 11 de noviembre - que las autoridades indias calificaron como un “atroz ataque terrorista”, perpetrado por “grupos con conexiones internacionales” - se produjo después de que la policía de Cachemira había desmantelado una presunta célula militante en Cachemira, seguida por una ola de arrestos que condujeron a las investigaciones de los últimos días, incluyendo la incautación de grandes cantidades de material para la fabricación de bombas en Faridabad, almacenado en la estación de policía de Nowgam. La situación en la región en disputa se agrava por las fricciones internacionales con Pakistán: la investigación sobre la célula había comenzado el mes pasado cuando en la ciudad de Srinagar, en Jammu y Cachemira, aparecieron carteles de apoyo al grupo terrorista armado Jaish-e-Mohammad que cuenta con el respaldo de Pakistán.
Las investigaciones del mes pasado condujeron a 7 arrestos, entre ellos dos médicos reconocidos de Cachemira que trabajan en otros estados de la India. En una de las redadas en Haryana la policía dijo haber descubierto 2.900 kg de materiales explosivos, así como sustancias químicas, detonadores y armas. La explosión cerca del Red Fort no fue reivindicada, pero la policía india habla de un “ecosistema” de profesionales “radicalizados” con contactos en Pakistán y otros Países.
