Los turcomanos siguen su propio calendario con un ciclo de 12 años. Dirigiéndose a la población, el presidente-hijo Serdar Berdymukhamedov ensalzó los logros del año transcurrido, empezando por la inauguración de la ciudad futurista de Arkadag, dedicada al presidente-padre.

Ashgabat (AsiaNews) - El presidente de Turkmenistán, Serdar Berdymukhamedov, ha querido imitar a su predecesor el padre Gurbanguly, que cada año predecía los acontecimientos del nuevo año basándose en cálculos astrológicos, y ha felicitado a todos los turcomanos por el año 2024, considerándolo, según el "calendario oriental", el Año del Pez. En realidad, en el resto de países será el Año del Dragón, pero Turkmenistán se distingue.

En efecto, diversas agencias y sitios en línea explican que los turcomanos siguen su propio calendario con un ciclo de 12 años, que asigna a este año el símbolo del Pez y que no comienza el 10 de febrero como en China, sino el 21 de marzo. Haciendo referencia a las opiniones de "eruditos" distinguidos y anónimos, se reitera que el calendario turcomano existe "desde tiempos inmemoriales" y se utilizaba para regular las labores agrícolas.

Dirigiéndose a la población, el presidente-hijo ensalza los éxitos del pasado año, empezando por la inauguración de la ciudad futurista de Arkadag dedicada al presidente-padre, la construcción de muchos otros edificios y lugares de gran importancia, la cosecha de "riquísimos productos del campo" y otros logros en todos los ámbitos. No se menciona la grave crisis económica que obligó a racionar incluso la harina, mientras Serdar expresa su alegría por el nacimiento del primer hijo justo después de la medianoche del 31 de diciembre, en Arkadag, por supuesto. Los entusiastas padres, como informa el periódico Nejtralnyj Turkmenistan, eligieron para él "un nombre de gran respeto e inspiración para el futuro", y lo llamaron "Arkadag".

A pesar de la oposición de los imanes musulmanes a las celebraciones de Año Nuevo y a los árboles decorados, la agencia estatal Gosinformagenstvo informó con todo lujo de detalles sobre la celebración pública en la plaza central de Ašgabat, preparada con gran sacrificio por los alumnos y el personal de la escuela en torno al gran árbol, señalando que es el más alto de todos los países de la Comunidad de Estados Independientes.

Los Berdymukhamedov, sin embargo, no asistieron a la fiesta callejera, sino que esperaron el Año Nuevo en el calor del círculo familiar y de la suntuosa villa presidencial. Los hijos de Serdar, nietos del Hero-Arkadag, pintaron cuadros, interpretaron composiciones musicales y cantaron, y desearon lo mejor a los adultos recitando poemas "en turcomano, ruso e inglés, haciendo feliz a su abuelo", como señala la nota informativa.

El día anterior a los festejos, Gurbanguly había visitado "su" nueva ciudad para felicitar al equipo de fútbol local, que ganó el campeonato y la copa nacional a lo grande, venciendo a todos los rivales a pesar de ser su primer año. En el nuevo estadio de la ciudad, el Padre de la Patria y Presidente del Senado obsequió a los jugadores con un balón firmado por su hijo, el Presidente de la República, y a continuación premió también al jefe del comité de construcción y urbanismo, Arkadag Degyareldi Orazov, y al alcalde de la ciudad, Šamukhammet Durdylyev, quienes a su vez exhibieron con orgullo el nuevo pullman del equipo campeón, obsequiado por el Presidente Serdar.