Gaza, Mons. Bizzeti con los Sacerdotes contra el Genocidio: 'No podemos callar'
El prelado, ex vicario de Anatolia, es uno de los más de 500 firmantes de la declaración que denuncia la "tragedia humanitaria" de la población civil palestina. El 22 de septiembre se celebrará en Roma una oración pública por el fin "del genocidio" y una paz "desarmada y desarmante". La comunidad internacional y Occidente no han hecho "ningún intento real de detener a Israel"; detrás de esta guerra hay "un negocio formidable. Hay que detener el envío de armas".
Milán (AsiaNews) - "En Gaza se está llevando a cabo un genocidio, como reconocen incluso diversas asociaciones e historiadores israelíes", por eso "nosotros, sacerdotes, religiosas y obispos" no debemos tener miedo de "afirmar la verdad, la realidad de los hechos", explica a AsiaNews Mons. Paolo Bizzeti, quien fue vicario apostólico de Anatolia (Turquía) durante casi 10 años. Mons. Bizzeti es uno de los más de 500 miembros del clero e instituciones religiosas católicas que han firmado el documento titulado "Sacerdotes contra el Genocidio". Contactado por teléfono en Jordania, donde se encuentra de visita con un grupo de jóvenes periodistas italianos, explica: "Estamos ante un país, Israel, que sabe que puede atacar impunemente a los débiles. Eso es terrorismo de Estado, usa los mismos métodos; sin embargo, a nivel internacional existen estándares y medidas diferentes" para juzgar las acciones.
En estas horas los medios de comunicación muestran imágenes de "miles de personas que se desplazan a pie a lo largo de la playa, en Gaza, huyendo sin saber a dónde", cuenta Mons. Bizzeti, mientras "son bombardeados indiscriminadamente" por aviones de combate y tanques del ejército con la estrella de David. "No entiendo por qué hay que hacer distinciones buscando la quinta pata al gato - continúa - los hechos son claros: se está llevando a cabo un genocidio". Por eso, advierte, "es importante que haya sacerdotes, obispos, religiosas y religiosos que, mirando al Evangelio, digan sí cuando es sí y no cuando es no. Se trata de tomar conciencia, también en el mundo católico, de la verdad, que hoy es quizás el aspecto más importante del que hay que dar testimonio".
El obispo jesuita de 77 años (nacido en Florencia el 22 de septiembre de 1947) es uno de los firmantes del documento "Sacerdotes contra el Genocidio", que se emitió con el propósito de romper la red de silencios y explicaciones arbitrarias ante la "tragedia humanitaria de la población civil palestina" en Gaza y Cisjordania. Esta es una red, sigue diciendo la declaración, que no busca "fomentar el odio o la división", sino dar voz "unitaria" a las iniciativas personales que "expresan denuncia y llamado a la justicia, en fidelidad al Evangelio y a la Constitución italiana". La "Palabra de Dios" junto con la "Constitución italiana" y los "acuerdos internacionales" son los principios que inspiran la iniciativa, que no quiere ser "contra alguien, sino a favor de toda vida humana". Los promotores rechazan al mismo tiempo la acusación de "antisemitismo" que se ha utilizado en estos años para atacar a quienes critican los diversos frentes de guerra de Israel, desde Gaza hasta el Líbano, pasando por Siria,Yemen, Cisjordania, Catar e Irán.
Uno de los objetivos del documento es invitar a orar "por una paz desarmada y desarmante" en los Territorios Palestinos Ocupados y en los más de cincuenta lugares donde "estamos viviendo una tercera guerra mundial en pedazos", dice retomando las palabras del Papa Francisco ante la ONU. Y también, "denunciar el genocidio que se está llevando a cabo en Gaza", para pedir que se respeten el derecho internacional, las "resoluciones de las Naciones Unidas y los pronunciamientos de la Corte Penal Internacional", así como "promover una cultura de reconciliación". El 22 de septiembre se ha organizado en Roma un momento de oración pública por el fin "del genocidio" en Gaza, la condena "de los crímenes de guerra", la defensa de la vida humana y el "desarme del Estado de Israel para evitar más muertes de inocentes".
Retomando los temas del documento, Mons. Bizzeti no escatima críticas a la comunidad internacional y a las cancillerías occidentales que aprueban la guerra o por lo menos no hacen nada para detenerla realmente. El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, afirma, está "respaldado" por Estados Unidos y por el presidente estadounidense Donald Trump, pero también puede continuar gracias "al uso de armas italianas". "Detrás del conflicto", sigue diciendo, "hay un negocio formidable", tanto que la misma bolsa de Tel Aviv "ha crecido desmesuradamente" y a fines de julio marcó un récord histórico de los índices con un incremento del 600%, acompañado de un desarrollo considerable del mercado de las startups. "Esto significa", advierte el prelado, "que detrás de las bombas hay negocios alucinantes, en los que todos estamos involucrados". Esa es la razón de las críticas a Occidente, que "promueve embargos" contra algunos países "reduciendo a la población a la miseria y consolidando poderes fundamentalistas", mientras que no se hace nada contra Israel. "No tenemos el coraje de decir y pedir", acusa, "que se suspenda el envío de armas".
En contraposición, el obispo elogia el testimonio "cristiano" del párroco de Gaza, el P. Gabriel Romanelli, y del patriarcado latino de Jerusalén, que han elegido quedarse y compartir el destino de los cristianos de Gaza. "Han tenido la fuerza y el coraje", afirma, "de decir que esta es nuestra tierra, que nos quedamos y estamos junto a ellos. Por eso nosotros [en Occidente] tampoco debemos dejarlos solos, no debemos abandonar a la Iglesia de Tierra Santa", en Gaza, en Jerusalén o en Taybeh, donde está siendo atacada. Mons. Bizzeti, quien ha visitado Tierra Santa y sus comunidades cristianas durante décadas, también pide «acción catequética y profética» a los dirigentes cristianos, que deben condenar inequívocamente a aquellos dirigentes que, usando incluso el nombre de Dios, han "creado el infierno en la tierra. Debemos decir que quien tiene el infierno en el corazón, quien crea y elogia el infierno, también terminará en el infierno".
El prelado ha vivido muchos años en Turquía y dedica una última reflexión a las tensiones entre los dos países y entre Netanyahu y el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, intensificadas por el ataque contra los referentes de Hamás en Catar. A pesar del enfrentamiento verbal, concluye el prelado, "No creo que exista riesgo de un atentado con bomba o un ataque como el de Doha en Turquía por muchas razones, entre ellas, porque es un país que opera sabiendo que puede atacar a los débiles con impunidad".
26/10/2023 14:34