Xi Jinping y Lee Jae-myung: comercio y Pyongyang para reabrir el diálogo

La conversación telefónica entre el nuevo presidente surcoreano y el líder chino duró cerca de 30 minutos. Beijing insistió en la importancia del "multilateralismo" en el marco del conflicto económico abierto por los aranceles de Trump. Seúl pidió a Xi un "rol constructivo" en el proceso de "desnuclearización" de la península coreana.

Beijing (AsiaNews) - Colaboración en los principales temas de la agenda internacional, desde el libre comercio hasta la defensa del "multilateralismo", fue lo que pidió el presidente chino Xi Jinping a su homólogo surcoreano Lee Jae-myung en la primera conversación telefónica entre los dos presidentes desde el triunfo electoral del candidato progresista en Seúl. Por su parte, Lee pidió al líder chino, en una conversación de tono relajado, un "papel constructivo" en el proceso de "desnuclearización" de la península coreana, sobre la que pesa la amenaza atómica de Pyongyang.

Durante la conversación telefónica, que duró cerca de treinta minutos, el presidente Lee invitó a Xi Jinping a visitar Corea del Sur para participar en la cumbre de Cooperación Económica Asia-Pacífico, que se celebrará en la ciudad suroriental de Gyeongju en noviembre. Xi auspició que Beijing y Seúl infundieran "mayor certidumbre en las situaciones regionales e internacionales", según informó Xinhua, y que ambos países llevaran "la asociación estratégica de cooperación a un nivel superior".

"Una relación sana, estable y en constante profundización entre China y Corea del Sur está en consonancia con la tendencia actual", continuó Xi, quien luego insistió en la necesidad de "mantener una estrecha cooperación y coordinación multilateral". El objetivo, prosiguió, es "apoyar conjuntamente el multilateralismo y el libre comercio, garantizando la estabilidad y el buen funcionamiento de las cadenas industriales y de suministro globales y regionales".

La referencia está relacionada con las políticas en sentido contrario que ha impuesto el presidente estadounidense Donald Trump quien, desde su llegada a la Casa Blanca, ha desatado una verdadera guerra comercial a golpe de aranceles que preocupa al gobierno de Beijing. Por su parte, Lee "expresó la esperanza de que Corea del Sur y China promuevan activamente los intercambios y la cooperación en diversos sectores, como la economía, la seguridad, la cultura y los intercambios interpersonales, sobre la base del espíritu de beneficio mutuo e igualdad".

Por otra parte, la conversación telefónica entre Lee y Xi se enmarca en un contexto de profundas tensiones con Corea del Norte, que no parece interesada en los llamados al diálogo de Seúl ni en la oferta de diálogo de Trump a Kim Jong-un, en razón del creciente alineamiento de Pyongyang con Rusia, con una colaboración activa no solo en el ámbito económico sino también militar, incluyendo el envío de soldados norcoreanos al conflicto con Ucrania.

Según la agencia china Xinhua, Xi afirmó que los dos países deberían llevar su asociación de "cooperación estratégica" a un "nivel superior". La conversación fue el primer diálogo oficial de Lee con Xi y el tercero del nuevo presidente con un gobernante extranjero después de las que mantuvo con el presidente estadounidense Donald Trump y el primer ministro japonés Shigeru Ishiba.

El objetivo de Lee de llevar adelante una "diplomacia pragmática" debe afrontar un delicado equilibrio entre Washington - aliado militar de Corea del Sur - y Beijing, su mayor socio comercial, en medio de la creciente rivalidad entre las dos superpotencias. En este sentido, las relaciones entre Seúl y Beijing se han deteriorado como consecuencia del alineamiento cada vez más marcado con Washington y la cooperación trilateral con Tokio que promovió el expresidente Yoon Suk Yeol. Durante la campaña electoral, Lee abogó por una mejora de las relaciones con Beijing e insistió en que Corea del Sur debe mantener la distancia en las delicadas cuestiones diplomáticas - y militares - entre China y Taiwán.