Estela Padilla cuenta su experiencia con las comunidades de base filipinas en el Sínodo
La teóloga oriunda de Manila, actualmente secretaria ejecutiva de la Oficina para las Cuestiones Doctrinales de la FABC, fue elegida por el Papa Francisco entre las diez personas que, sin ser obispos asiáticos, participarán en la asamblea de octubre. En diálogo con AsiaNews, se refiere al viaje sinodal: "Me da energía, porque veo la conversión y la transformación de la Iglesia, con un enfoque más misionero”.
Manila (AsiaNews) - El Sínodo "será una ocasión para una auténtica renovación de la Iglesia". Quien lo afirma es Estela Padilla, una de las diez personas que sin ser obispos de Asia, participarán en la próxima Asamblea de octubre. Padilla fue consultora de las Comunidades Eclesiales de Base (CEB) de la Conferencia Episcopal de Filipinas (CBCP) y secretaria ejecutiva de la Oficina de Asuntos Teológicos de la Federación de Obispos Asiáticos (FABC).
Ante la pregunta de cómo se sintió al enterarse de que el Papa Francisco la había incluido entre los miembros que, sin ser obispos, participarán del Sínodo de los Obispos, Padilla dijo a AsiaNews: "Sentí una honda alegría y un sentido aún más profundo de responsabilidad. El Sínodo me ha fascinado y estimulado desde el principio. Habiendo participado en procesos sinodales locales, nacionales e internacionales, espero ver cómo crecen y se nutren las semillas plantadas, en camino hacia una auténtica renovación."
Durante la conversación con AsiaNews se abordó el tema del derecho a votar durante el Sínodo. Padilla dijo que no se trata de ganar o perder. Si así fuera, los hombres y mujeres que no son obispos siempre serían una minoría. "Espero que el Sínodo sea un espacio para concientizar, escuchar la gracia y hablar con parresía. La participación de los no-obispos será un ejercicio de auténtico discernimiento comunitario y de toma de decisiones, guiado por la pregunta: ‘¿Hacia dónde nos lleva el Espíritu?’"
Las comunidades eclesiales de base, especialmente entre los pobres, llevan la voz de la fe durante las luchas de la vida cotidiana. "Las Iglesias asiáticas me hacen oír la voz de la minoría y la diversidad. Estas voces influyen en nuestra práctica de una teología comunitaria en la Oficina de Cuestiones Teológicas de la FABC. Estas experiencias me han preparado para participar en el diálogo, el discernimiento comunitario y la toma de decisiones que tendrán lugar en el Sínodo".
Su oficina, "Bukal ng Tipan" ("Fuente de la Alianza") -un instituto pastoral responsable de la formación de líderes de comunidades eclesiales de base en toda Filipinas, dirigido por la Congregación del Inmaculado Corazón de María (CICM)- ha estado trabajando con varias diócesis y organizaciones eclesiales de Filipinas y del extranjero en pro de una "Iglesia participativa en el mundo".
"Con los equipos locales, diseñamos programas de evangelización que se adaptan a la cultura", explica Estela Padilla. Toman en cuenta “el contexto y se orientan a la misión. Facilitamos la formación para la organización de cada comunidad de base -liderazgo comunitario, juventud y otros ministerios- además de proponer procesos participativos de visión-misión".
En los últimos dos años, el centro ha integrado y diseñado enfoques más sinodales en los programas de formación, retiros y planificación pastoral, incluida la colaboración entre distintos ministerios y con la sociedad civil.
"Participar de los procesos sinodales a nivel nacional e internacional me ha llenado de energía, porque veo la conversión y la renovación de la Iglesia con un enfoque más misionero". "Aunque habrá muchas tensiones y decepciones en el Sínodo de octubre”, concluye, “espero sinceramente que no frustremos al Espíritu de Dios que quiere renovar la Iglesia desde sus raíces".
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