17/12/2023, 13.29
ECCLESIA IN ASIA
Enviar a un amigo

Filipinas, Misa de gallo con los pobres para preparar la Navidad

de Santosh Digal

En las parroquias de todo el país y en la diáspora de los migrantes, en todos los rincones del mundo, se renueva la tradición del Simbang Gabi, las misas celebradas al amanecer durante los nueve días previos a la Navidad. Mons. David, presidente de la Conferencia Episcopal: "Que la novena nos ayude a acoger verdaderamente a Cristo en nuestras vidas".

Manila (AsiaNews) - Ayer por la mañana millones de católicos filipinos comenzaron a acudir masivamente a las iglesias para participar en el Simbang Gabi, las misas que se celebran cada día al amanecer durante los nueve días previos a la Navidad, hasta la mañana del 24 de diciembre.

Todas las parroquias de Filipinas participan en una de las prácticas católicas más antiguas e importantes del país. Y cerca de 10 millones de filipinos que trabajan lejos de su país, dondequiera que estén, también se reúnen siempre que les resulte posible para celebrar las misas de la novena.

El primer día del Simbang Gabi - en el complejo de la Catedral de San Roque, en Kaloocan City, cerca de Manila - Mons. Pablo Virgilio David, obispo de Kalookan y presidente de la Conferencia Episcopal de Filipinas, expresó la esperanza de que "estas misas del amanecer ayuden a los católicos a prepararse espiritualmente para acoger a Cristo en sus vidas".

Mons. David invitó también a los católicos a llevar la alegría a los pobres, los necesitados y los marginados con expresiones de la caridad que nace de la Navidad y participando en la entrega de regalos que se organiza en las diferentes comunidades.

La devoción de las "misas del alba" existe en Filipinas desde el 1600, la introdujeron los misioneros mexicanos que llegaron después de los conquistadores españoles. Los misioneros celebraban la misa a las 4 de la mañana, cuando el gallo cantaba para anunciar el comienzo de un nuevo día. De esa manera los campesinos podían ir a misa antes de comenzar el trabajo en los arrozales.

Con el paso de los años la tradición de los nueve días previos a la Navidad se fue transformando en una manera de dar la bienvenida al "nuevo día" que trajo el nacimiento de Cristo. La oración se centra en la Virgen María, porque es ella quien dio a luz al Salvador. Según la costumbre, después de la Misa, los files comen juntos alimentos tradicionales hechos con arroz.

Mary Rose Castro, una filigresa católica con cuatro hijos, cuenta a AsiaNews: "Asistimos a las misas del amanecer desde que éramos niños. Es una práctica tradicional en Filipinas para celebrar la Navidad".

El padre Daniel Franklin Pilario, teólogo vicenciano de la Escuela de Teología San Vicente y presidente de la Universidad Adamson de Manila, explicó que "las misas de la novena han desempeñado un papel muy importante para mantener viva nuestra fe en Filipinas". Hoy, después de la pandemia y en el comienzo de este Simbang Gabi - comenta - los católicos deben mirar la Navidad desde el punto de vista de los pobres, de los niños de la calle y de las personas marginadas de la sociedad: "Sus vidas difíciles son una ventana al verdadero significado de la encarnación".

"ECCLESIA IN ASIA" ES EL BOLETÍN DE ASIANEWS DEDICADO A LA IGLESIA EN ASIA. ¿QUIERES RECIBIRLO CADA DOMINGO EN TU CORREO ELECTRÓNICO? SUSCRÍBETE AL BOLETÍN EN ESTE ENLACE

TAGs
Enviar a un amigo
Vista para imprimir
CLOSE X
Ver también
Con la 'Misa del gallo', los católicos se están preparando para las celebraciones de Navidad
18/12/2017 12:59
En Manila, el card. Tagle inaugura la novena de Navidad: No a la ansiedad, al bullying y a la prepotencia
18/12/2018 15:03
​Obispo de Bangalore: En Navidad compartamos la alegría de Dios con aquellos que nos hacen el mal
23/12/2015
Papa: Los filipinos emigrados sean ‘levadura’ en las comunidades a las que pertenecen
15/12/2019 00:32
La "Misa de gallo" entre las favelas de Leyte, en espera del Papa Francisco
30/12/2014


Newsletter

Suscríbase a la newsletter de Asia News o cambie sus preferencias

Regístrese
“L’Asia: ecco il nostro comune compito per il terzo millennio!” - Giovanni Paolo II, da “Alzatevi, andiamo”