Los pueblos menores de Rusia no reconocen las elecciones

de Vladimir Rozanskij

En un comunicado conjunto, líderes autonomistas de tártaros, circasianos, escandinavos, baskiri y activistas de otras minorías desautorizan los resultados de las elecciones locales celebradas en todo el país hace quince días. Califican la votación, fuertemente influida por la represión de cualquier voz alternativa a Putin, de "vergonzosa farsa política" en una "Federación Rusa que no tiene futuro".

Moscú (AsiaNews) - Los diversos movimientos regionalistas y de liberación nacional, que representan a los pueblos autóctonos y a las regiones "colonizadas" de la Federación Rusa, han hecho público un comunicado en el que afirman que no reconocen los resultados de lo que denominan las recientes "pseudoelecciones" administrativas en los diversos sujetos federales celebradas del 8 al 10 de septiembre, que también afectaron a las regiones ocupadas y "anexionadas" de Ucrania.

Las elecciones, según el comunicado, fueron organizadas "por el régimen criminal ruso, dirigido por el criminal internacional Vladimir Putin". Los movimientos independentistas declaran que no reconocen "esta vergonzosa farsa política". En un momento de agresión bélica, de imposición cada vez más explícita de la dictadura y de privación de los derechos y libertades de los ciudadanos, con el cierre de los medios de comunicación independientes y de las instituciones de defensa social, en medio de la represión política y la persecución de los "que piensan diferente", estas elecciones mostraron aún más claramente que "la Federación Rusa no tiene futuro, y el régimen de Putin no cuenta con un verdadero consenso entre el pueblo, en realidad está viviendo sus últimos días".

Fue una elección mentirosa del Ruscismo, el régimen ruso-fascista, por un país-terrorista dirigido por criminales de guerra, decía la declaración. Oponerse a ella, según los representantes de los pueblos de Rusia, 'es posible por muchos otros medios, incluida la resistencia armada, pero sin intentar hundirse al nivel del sistema criminal de Putin'. Ciertamente, "hoy en día no es posible celebrar elecciones honestas en Rusia, y la existencia de este Estado mentiroso constituye una amenaza para todo el mundo civilizado". Por ello, los pueblos no rusos proponen "desmantelar totalmente" la Federación, creando una serie de nuevos países independientes en las "regiones colonizadas por Rusia", como posible garantía de paz para todos.

El Comité Internacional de los Pueblos Nativos de Rusia lleva las firmas de Sergej Antonov, del movimiento "Udmurtia Libre", Rafis Kašalov, primer ministro del gobierno del Tatarstán independiente en el exilio y cofundador del movimiento "Idel-Ural Libre", que reúne a las diversas nacionalidades de la zona de los Urales, Meretuko Kenan Kaplan, presidente del Consejo Unido de la Circasia, Denis Ugrjumov del movimiento "Ingermanlandia Libre" de los pueblos escandinavos de Rusia, Ruslan Gabbasov, líder del movimiento nacional vasco en el extranjero, Aida Abrakhmanova, del Centro Social Pan-tártaro de Suecia, Petr Khlebovič, de la oposición anticomunista de Polonia y copresidente de la sección oriental de los "combatientes de Solidarnost", y muchas otras personalidades que llevan mucho tiempo implicadas en la promoción de la autonomía de estos pueblos. También actúan activistas, políticos y académicos de Kazajistán, Bielorrusia, la región rusa de Smolensk, en la frontera con Polonia y Bielorrusia, y diversas zonas de Siberia y el Cáucaso.

Los firmantes recuerdan que "en la historia todos los pueblos se enfrentan a pruebas, hay días de alegría y días de tristeza, y siempre debemos honrar la memoria de nuestros antepasados, nuestros héroes nacionales, que con su propio sacrificio, arriesgando y perdiendo la vida, defendieron los intereses de pueblos, regiones y Estados". Desde el poeta ucraniano Taras Ševčenko hasta Nelson Mandela, no faltan ejemplos a seguir, en todos los países del mundo.