Papa: Es una locura aumentar el gasto en armamento

En su discurso a los participantes en un encuentro organizado por el Centro Italiano Femenino, Francisco afirmó que se sentía "avergonzado" por las decisiones que han tomado algunos países en los últimos días como respuesta a la guerra. “La cultura del cuidado del otro, no de las armas” es el verdadero camino, y recordó a Gandhi “que guió a un pueblo hacia la libertad por el camino de la no violencia”. Las mujeres como modelo de otra forma de hacer política.

Ciudad del Vaticano (AsiaNews)- La verdadera respuesta a la guerra “no es más guerra, más sanciones, más alianzas político-militares”, sino “convertir el poder de la lógica de la dominación a la lógica del cuidado”. En este desafío las mujeres tienen una responsabilidad especial, dijo hoy el Papa Francisco al recibir en audiendia en la sala Clementina del Vaticano a los participantes en un encuentro organizado por el Centro Italiano Femenino.

El Pontífice habló sobre el compromiso de la mujer en la sociedad e hizo referencia al conflicto en Ucrania, observando que “la buena política no puede venir de la cultura del poder entendida como dominación y opresión, sino sólo de una cultura del cuidado, del cuidado de la persona y su dignidad y del cuidado de nuestra casa común. La guerra vergonzosa que estamos presenciando lo demuestra, por desgracia, negativamente”.

“Guerras regionales nunca han faltado -añadió- por eso dije que estábamos en la tercera guerra mundial en pedazos, un poco en todas partes; hasta que llegamos a ésta, que tiene una dimensión mayor y amenaza al mundo entero. Pero el problema de fondo es el mismo: seguimos gobernando el mundo como un “tablero de ajedrez”, donde los poderosos estudian las formas de extender su dominio en detrimento de los demás”.

El Papa Francisco ha estigmatizado expresamente el regreso de la carrera armamentista. "Me he sentido avergonzado -dijo- cuando leí que un grupo de Estados (los de la OTAN, ndr.) se han comprometido a gastar el 2 por ciento de su presupuesto en la compra de armas". El Papa afirmó que era una "locura". “La verdadera respuesta -prosiguió- no son más armas, más sanciones, más alianzas político-militares, sino un enfoque diferente, una forma diferente de gobernar el mundo, ahora globalizado, sin mostrar los dientes. Una forma diferente de plantear las relaciones internacionales. El modelo del cuidado ya está en marcha, gracias a Dios, pero lamentablemente sigue sometido al poder económico-tecnocrático-militar”.

Por eso invitó a las mujeres a ser "protagonistas de este cambio de rumbo, de esta conversión". “Es la escuela de Jesús -añadió- que nos ha enseñado que el Reino de Dios se desarrolla siempre a partir de una pequeña semilla. Es la escuela de Gandhi, que ha guiado a un pueblo hacia la libertad por el camino de la no violencia. Es la escuela de los santos y santas de todos los tiempos, que hacen crecer a la humanidad con el testimonio de una vida dedicada al servicio de Dios y del prójimo. Pero es también -diría, sobre todo- la escuela de innumerables mujeres que han cultivado y custodiado la vida; de mujeres que han cuidado las fragilidades, que han curado las heridas, que han curado las llagas humanas y sociales; de mujeres que han dedicado su mente y su corazón a la educación de las nuevas generaciones”.